domingo, 31 de marzo de 2013

Radiografía de la extrema derecha sevillana. Desde lo marginal hacia las instituciones





Los años en el gobierno local de PSOE e IU sirvieron para crear un entramado de asociaciones marginales de extrema derecha que ahora, con Juan Ignacio Zoido (PP) en el Ayuntamiento, ha alcanzado un protagonismo inusitado en las instituciones municipales.

Aitor M. Carmelo  18/03/13

 

· “Son pocos, son bobos, pero organizaos”. Así decía una canción del grupo sevillano de rock Reincidentes. Compuesta en los años noventa, la letra advertía sobre el peligro de la ultraderecha. A día de hoy la situación no ha cambiado mucho en Sevilla. Siguen siendo pocos y entre sus filas no destaca ninguna mente preclara. Sin embargo, ahora, además de estar organizados, cuentan con un importante valedor en la ciudad de Sevilla: Juan Ignacio Zoido, alcalde de la ciudad por el Partido Popular tras la mayoría absoluta conseguida en las pasadas elecciones municipales.

Durante los últimos años han proliferado en Sevilla un importante número de asociaciones y colectivos que, como el Foro Sevilla Nuestra, la Coordinadora Sevillana Contra el Terrorismo o la Asociación Cultural Fernando III, aglutinan y representan el discurso de la extrema derecha en la ciudad. Su razón de ser ha sido doble durante estos años. Por una parte, han protagonizado una dura campaña de descrédito contra el gobierno municipal de la época, dirigido por PSOE e IU, apoyando abiertamente a la oposición que representaba el Partido Popular. Por otro lado, han concentrado sus esfuerzos también en denunciar y perseguir cualquier actividad que, bajo su más que peculiar perspectiva, constituyera un acto de enaltecimiento del terrorismo. De esta forma, durante todo este tiempo, han buscado en convertirse en una suerte de lobby de presión mediático y judicial que criminalizase a cualquier grupo o colectivo de izquierda, al movimiento okupa e incluso a cualquier grupo musical que no fuera de su agrado. Periódicos como La Razón se han hecho eco de sus comunicados participando activamente en esta campaña.

Un ejemplo claro lo constituye la Coordinadora Sevillana Contra el Terrorismo, cuya principal labor parece ser el envío de comunicados de prensa que denuncian a todo aquel que, a sus ojos, promueve el terrorismo. Respecto al proceso judicial en el que se pedía un año de cárcel y una millonaria multa a 24 estudiantes, en el marco de las protestas contra la Ley Orgánica de Universidades, por el que finalmente fueron absueltos todos los procesados, se aventuraban a a afirmar que “Desde la CSCT exigimos que se aplique con rigor el código penal y que estos vándalos paguen por esta acción violenta y salvaje”. También llegaron comunicados a todos los medios de comunicación advirtiendo de la celebración en Sevilla de conciertos de grupos que, como Ska-P, Los Chicos del Maíz o El Trono de Judas, según el colectivo promovían el terrorismo. “Los integrantes de este grupo, denominado Ska-P se refieren, por ejemplo, ’a los perros del Vaticano’ y aluden al papa Benedicto XVI como ’encubridor’ de los casos de pederastia”. Este tipo de denuncias también se han dirigido contra buena parte de las charlas y actos públicos que las organizaciones de izquierda de la ciudad han organizado. En su web (http://terroristasnogracias.blogspot.com/) se comparten contenidos y se anuncian los actos de otros colectivos de la ciudad, como el Foro Sevilla Nuestra.

El Foro Sevilla Nuestra (http://www.forosevillanuestra.com/) es una de las asociaciones de este conglomerado que más actos públicos ofrece. Ángel Bordas es su presidente mientras que Javier Cortés ocupa la vicepresidencia. En un acto celebrado el pasado 12 de octubre, en la Plaza del Triunfo, y con presencia de miembros de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, Ángel Bordas inició su intervención para agradecer la colaboración en el acto de Arenal 2000 “por las banderas que nos ha cedido”. Arenal 2000 es una tienda conocida por distribuir banderas, ropas y materiales para grupos de estética nazi y ultraderechista, caracterizada por usar yugos y flechas así como otra simbología preconstitucional. El Foro Sevilla Nuestra tiene una importante conexión con otras organizaciones a nivel estatal, habiendo participado, por ejemplo, en el último congreso de la Fundación para la Defensa de la Nación Española (DENAES), celebrado el pasado mes de julio en Santander, y cuyos ponentes estrella fueron Jaime Mayor Oreja (ex-ministro y eurodiputado por el PP) y Luis del Pino (“Periodista observador del 15M”, sic). En este congreso estuvieron también representadas asociaciones como el Foro de Ermua, Manos Limpias, la Mesa para la Libertad Lingüística en Galicia, Convivencia Cívica Catalana y HazteOir.

En una entrada de su blog correspondiente al pasado 28 de junio el Foro Sevilla Nuestra se congratula de que “dirigentes vecinales del movimiento asociativo independiente de Sevilla entran en los Consejos de Administración de importantes empresas municipales”. La noticia es acompañada de una foto de Pepe Baena, presidente de C.A.I.S. (Coordinadora de Asociaciones Independientes de Sevilla). El Foro Sevilla Nuestra lo explica así: “el nuevo ciclo político en el Ayuntamiento ha dado lugar a un cambio en los representantes de la sociedad civil en las empresas municipales. Los consejos de administración de Emvisesa, Sevilla Global, Tussam, Lipasam y Giralda TV que se aprobaron ayer excluyen a la federación Unidad -vinculada al PSOE-, a Facua y a la UCE. En su lugar, el PP incorpora a un listado de representantes vecinales de distintas zonas de la ciudad”. Gracias a ello Pepe Baena obtiene un puesto importante en el Consejo de Administración de Lipasam (empresa municipal de limpieza). Pero, ¿quién es Pepe Baena? De su larga trayectoria asociativa tenemos retazos como el hecho de que en 2007, tal y como cuenta ABC Sevilla, fuera nombrado portavoz de la Plataforma Salvar Sevilla, nacida para “defender a la ciudad de los desmanes que se están cometiendo” en ella.

El Foro Sevilla Nuestra ofrece también una interesante información en su web, publicada justo tras las últimas elecciones municipales y que se titula “Sevilla necesitaba a Zoido”. En ella afirman tranquilamente que “así lo dictaminaron de manera casi unánime los sevillanos. Nunca jamás un partido había sacado en Sevilla 20 concejales, y es por ello por lo que debemos felicitar a Juan Ignacio Zoido por su excelente resultado.Tal vez sea el momento de empezar a hablar de la posible privatización de esas empresas públicas que pertenecen al Ayuntamiento que no suponen más que un despilfarro de dinero”. Y el representante del Foro Sevilla Nuestra, en una empresa pública. El artículo termina con una advertencia: “Juan Ignacio, espero que cumplas las expectativas porque estaremos todos pendientes. Esta victoria es tuya por supuesto, pero también de la ciudadanía. NO nos defraudes”.

Pero, ¿qué es el Foro Sevilla Nuestra? ¿Una asociación? ¿Un partido político? ¿Un movimiento ciudadano? ¿Un lobby de presión? Ángel Bordas lo explicó en el acto celebrado el pasado 12 de octubre: “Foro Sevilla Nuestra es una asociación cultural sevillana que pretende fomentar nuestra cultura y nuestra identidad. Este año hemos conseguido que la bandera española ondee en el mástil más grande de Andalucía: en la glorieta mítica. Fomentamos también el Día de San Fernando. Foro Sevilla Nuestra estará atenta para que no se construya ningún tipo de macromezquita en Sevilla. Este año además participaremos en las Juntas de Distrito, que para quién no lo sepa son como los pequeños ayuntamientos de distrito. Nuestra propuesta será quitar la calle a Pilar Bardem, a Víctor Jara y a todos los pintas estos que fomenta la izquierda”. Como bien podíamos intuir, Ángel Bordas goza de muy buenos contactos y tiene tras de sí una estructura más que sólida.

La tercera pata de este conglomerado ultraderechista la constituye la Asociación Cultural Fernando III que, junto a la Asociación Cultural Ademán, destaca por la organización de numerosos actos “culturales”, charlas y presentaciones de libros en su mayoría. Sus referentes intelectuales son Agustín de Foxá (autor del Cara al Sol), Ramiro de Maeztu y Ramiro de Ledesma. Para sus actos públicos han contado con las magníficas instalaciones del Ateneo de Sevilla y de la Fundación Valentín de Madariaga. A iniciativa de la Asociación Cultural Fernando III se constituye en Sevilla la Agrupación Excursionista La Lobera (en homenaje a la espada que portaba Fernando III), dirigida a sus seguidores más jóvenes.

Para actuar en el ámbito universitario surge la Coordinadora de Estudiantes Aula Inconformista. El logotipo de este grupo es sospechosamente parecido al del Movimiento Social Republicano (MSR), un grupo de corte ultraderechista en auge en los últimos tiempos. Entre su escasa actividad destaca su participación en manifestaciones en contra del aborto en la que portaban una inmensa pancarta rojigualda en la que se podía leer “Aborto=Crimen”.

Pero el grupo más radical de todo este conglomerado lo constituye sin duda Sevilla No Conforme. Su dirección web resulta más que significativa: http://antiantifasevilla.blogspot.com/. Una de las últimas entradas que ofrece el blog informa de la posibilidad de adquirir participaciones en el sorteo de navidad de la Lotería Nacional en apoyo a Josué, el militar fascista que apuñaló mortalmente hace unos años en Madrid a Carlos Palomino, un joven antifascista de tan sólo 16 años. El discurso político de este grupúsculo, probablemente formado por poco más que un individuo, es realmente caótico. Las declaraciones antiimperialistas en apoyo a Gadafi se mezclan con canciones de grupos musicales ultraderechistas que proclaman la supremacía aria. El editor de la página dedica una canción al grupo Supporters Gol Sur (un grupo hincha del Real Betis conocido por agrupar en su seno a los skin heads de ideología nazi más peligrosos de Sevilla). Gracias a esta web también conocemos la existencia del Scooters Club La Rata Negra, un grupo de aficionados al modelo scooter de tendencia nacional-socialista, si tenemos en cuenta la parafernalia que ofrecen en sus fotografías, en las que reproducen el saludo de las SS (fuerzas de seguridad interna de Hitler).

Como es evidente, Sevilla No Conforme no esconde sus tendencias políticas más ultras. De esta forma, nos cuentan su participación en un encuentro de grupos fascistas europeos en Italia: “Fue un encuentro del máximo nivel que reunió a más de 2.000 jóvenes de toda Europa (en su sentido identitario), desde Rusia hasta la nación Boer, en un fin de semana de intensa actividad política y metapolítica —con debates, mesas redondas, puestos de propaganda—, lúdica —con actividades deportivas en el cercano Lago Rimene y los montes prealpinos— y festiva —con los conciertos de los mejores grupos de rock nacionalista e identitario de Italia y de buena parte de Europa, sin faltar la presencia española del grupo valenciano Brigada 1238—.

Todos estos grupos están presentes en internet, utilizando las mismas herramientas informáticas, con una línea de diseño muy parecida y, además, compartiendo la mayoría de sus contenidos. No obstante, durante los últimos años han dejado claras pruebas de su coordinación participando conjuntamente en distintas campañas. Se trata de distintos asuntos gracias a los cuales consiguen movilizar en algunos casos a importantes capas de la población. Los “temas estrella” de la extrema derecha, como no es difícil de imaginar, son el terrorismo y, sobre todo, la inmigración.

Hace ya varios años todas estas organizaciones coincidieron en la campaña que se desarrolló en el barrio de Los Bermejales y que consiguió impedir la construcción de una mezquita. Actualmente, las distintas organizaciones de extrema derecha de Sevilla vuelcan sus esfuerzos en la Plataforma Basta Ya de Asentamientos, que “lucha por devolver a las calles de Sevilla la simpatía y la tranquilidad de una ciudad turística y con futuro”, advirtiendo que “en los últimos años se ha detectado una invasión de vagos y maleantes, que se aprovechan de nuestro estado de bienestar”. De esta manera, en Triana y otros barrios de la ciudad, se han organizado patrullas ciudadanas que, cuando menos, se dedican a insultar e intimidar a inmigrantes y personas de etnia gitana. Al frente de esta Plataforma, como no es de extrañar, aparece de nuevo Ángel Bordas, Presidente del Foro Sevilla Nuestra. Pero no acaban ahí las coincidencias. La Plataforma Basta Ya de Asentamientos publicita un número de cuenta bancaria donde los interesados puedan enviar sus donaciones. Pues bien, es el mismo número de cuenta del Foro Sevilla Nuestra.

Las actividades delictivas de la Plataforma Basta Ya de Asentamientos fueron denunciados por el Grupo 17 de Marzo (Sociedad Andaluza de Juristas para la Defensa de los Derechos Humanos Individuales y Colectivos) ante la Fiscalía de Sevilla que, según manifiesta en la respuesta a la denuncia, no sólo no aprecia indicios de delito en los hechos denunciados, sino que además ni siquiera entiende como demostrada la existencia de patrullas vecinales en la ciudad de Sevilla, a pesar de las numerosas informaciones publicadas al respecto en los más diversos medios de prensa.

Desde DIAGONAL Sevilla se ha intentado contactar con todas y cada una de las asociaciones que a lo largo de este artículo se mencionan. Para ello utilizamos el único medio que se ofrecía: el correo electrónico. Sin embargo, aquellas que se han dignado a responder nuestros mails, tampoco son muy proclives a ofrecer información. De esta forma, un tal Julio Garrido, que se identifica como Adjunto a la Portavocía del Foro Sevilla Nuestra, responde a nuestro requerimiento haciéndonos saber que “normalmente concedemos entrevistas a cualquier medio medianamente serio. Sin embargo, el suyo no llega ni a ser un panfleto”. Nos advierte además que “nuestros abogados estarán pendientes de cuanto publiquen acerca de nuestra asociación, por si ello diera lugar a emprender acciones legales de cara a restituir la honorabilidad e imagen de FSN”. Desde Aula Inconformista, que agrupa a los estudiantes universitarios más ultraderechistas, nos contestan a nuestra petición de información que “no colaboramos con medios proetarras como vosotros”. Al mismo tiempo también nos advierten de que “nuestro departamento jurídico estará atento a lo que publiquéis acerca de nosotros”. La última de las asociaciones mencionadas en este artículo que tuvo la deferencia de contestar nuestro mail nos informó de que “nuestra plataforma no colabora con medios que apoyan o dan cobertura a ideas extremistas y totalitarias”.

 

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Socialdemocracia o socialdesgracia?



Por Rafael Castaño Rendón  Viernes, 29 de Marzo de 2013

 


Decía el Che que tenemos tres enemigos “el primero, el imperialismo; el segundo, el imperialismo; el tercero, el imperialismo”. El “estado del bienestar o keynesiano o socialdemócrata” es producto del imperialismo, luego,…

La noche del 15 de enero de 1919 la policía alemana, bajo las órdenes del gobierno socialdemócrata pega un tiro en la cabeza a “una mujer indefensa con cabellos grises, demacrada y exhausta. Una mujer mayor, que aparentaba mucho más de los 48 años que tenía”. Era Rosa Luxemburg.

Con este asesinato y lo que significaba, el Partido Socialdemócrata Alemán creía salvar al estado y al capitalismo alemanes frente al socialismo. Aquel día simbólico la socialdemocracia demostró lo que siempre ha sido, la corriente que, “inserta” como un quiste purulento en el seno del movimiento obrero y bajo el pretexto de mejorar la situación de las clases obrera en el capitalismo -o incluso de llegar al socialismo pacíficamente- cumple siempre su misión: salvar el orden capitalista cada vez que este se ve amenazado. No importa el precio. El capitalismo no puede sobrevivir sin la socialdemocracia.

Cuatro años antes el Partido Socialdemócrata Alemán había votado el presupuesto de guerra con el que Alemania participó en la Guerra Imperialista. La excusa, como es costumbre antes de todas las guerras, que el gobierno ruso podía acabar con la civilización alemana, con los derechos adquiridos por los obreros alemanes durante los últimos cuarenta años anteriores; por tanto, muy a su pesar, el SPD (Partido Socialdemócrata Alemán) vota los créditos para participar en la Guerra.

Luego, tras perder la guerra, en una Alemania convulsionada y moviéndose hacia la posibilidad (siempre es una posibilidad) de la revolución socialista, la socialdemocracia pega el tiro en la nuca a Rosa Luxemburg, a la revolución. Así salvaba de nuevo al capitalismo alemán en bancarrota.

Es la creencia más extendida el identificar, frente al partido de la revolución y el socialismo, la socialdemocracia como aquella corriente obrera que no acepta el que “para nosotros no es cuestión reformar la propiedad privada, sino abolirla; paliar los antagonismos de clase, sino abolir las clases; mejorar la sociedad existente, sino establecer una nueva” (Karl Marx).

A lo largo de su historia, la socialdemocracia ha desempeñado un papel básicamente reformista y por ello socialdemocracia y reformismo se han identificado. Sin embargo, lo que ha demostrado siempre la socialdemocracia es ser el partido de la tranquilidad: cuando está el capitalismo, busca la tranquilidad, a cualquier precio, aceptando reforma o aceptando, como hoy día, recortes: “En concreto: aspiran a corromper a la clase trabajadora con la tranquilidad, y así adormecer su espíritu revolucionario con concesiones y comodidades pasajeras” (Karl Marx, 1850).

Cuando se crea un estado revolucionario y socialista, siempre aparece una corriente que, a falta de otro nombre, también llamaré socialdemócrata, por su miedo a la revolución y al cambio, y que intenta vivir en su estado, conservar su estado, mantener los privilegios de la clase dirigente y burocrática de ese estado, y para conseguir la tranquilidad del “estado socialista” no duda en acabar con cualquier revolución externa que la ponga en peligro, como fue la política desplegada en el exterior por la Unión Soviética burocratizada: en las jornadas de mayo de 1937 en la revolución española, con la griega después de la II Guerra Mundial, el intento de impedir de todas las formas posibles que los comunistas chinos hagan su revolución (Mao dice que muy bien, pero él hace la revolución),… El partido de la socialdemocracia es, simplemente, el partido de la cobardía. Entre la esclavitud o la lucha consecuente, siempre elegirá la primera.

La socialdemocracia no es, en sentido estricto, un partido formal, sino una tendencia que irrumpe con las más variopintas formas, se alimenta del miedo que pueda tener el pequeño tendero, el funcionario, el campesino que medra en su trozo de tierra, el obrero asustado ante la gigantesca labor que tiene por delante,…frente a la bota del banquero como ante una clase revolucionaria en rebeldía. Entre ambos debe elegir, y si la revolución no muestra su fuerza, se acogerá a los brazos del banquero. Pero si la revolución tiene fuerza, el campesino, el funcionario, el pequeño burgués, el obrero no temerá unirse a ella. Sólo la lucha los lleva al campo de la revolución; cuando esta –y los partidos que debieran haber llamado a rebato- flaqueó en los años treinta, sabemos en manos de quién cayó. Hoy, como entonces, el fascismo está a la vuelta de la esquina, y no va a ser precisamente con luchas pacíficas y mendigando reformas pusilánimes como se le va a detener.

La socialdemocracia es la falta de fuerza y confianza de los de abajo ante la posibilidad de cambiar el estado de cosas existente, y se agarra a todo para que su pequeño mundo no se hunda bajo sus pies. Así Rodríguez Zapatero, el hombre de las pequeñas reformas, el 10 de mayo de 2010, ante una simple llamada telefónica de Washington o Berlín, opta por deshacer de la noche a la mañana lo que quedaba del precario estado del bienestar en España. El doce de mayo de 2010 se nos anunciaba a los españoles que la política que a partir de entonces iba a seguir el país no iba a emanar de las decisiones de Madrid, que en aquel momento pasaba a convertirse en una sucursal únicamente responsable ante el gobierno de Berlín.

La socialdemocracia es colaboradora: en España colaboró institucionalmente (me refiero a Largo Caballero y al PSOE de la época) con la dictadura de Primo de Rivera para obtener pequeñas concesiones, aunque luego abandona dicha colaboración en 1928 cuando los vientos de la tranquilidad navegaban de otra parte. A fines de la Guerra Civil, cuando había posibilidades de unir la revolución española con una más que hipotética Guerra Mundial, organiza un golpe de estado contra el legítimo gobierno de la República y acepta (Besteiro) la rendición incondicional doblando las rodillas ante Franco.

Cuando va cayendo la dictadura, a lo Tarrancón, los representantes de la socialdemocracia (un resucitado PSOE con el dinero alemán y un PCE que se deja llevar por el ansia de ser respetable e institucional), impiden la posibilidad del cambio, mientras cerca de doscientos muertos de luchadores de izquierda durante la transición (léase el libro de Alfredo Grimaldos)1 y un clima caldeado y combativo consiguen para una clase obrera en lucha las mejores condiciones laborales y sociales de toda su historia. Para acabar con todo ello se alza toda la tramoya del 23-F de 1981 y un año después nos hace su visita el socialismo de “la tercera vía”: aceptado el liberalismo político, se acepta el económico con todas las consecuencias. Misión cumplida.

En la crisis actual, la socialdemocracia española –por sentido de responsabilidad- apoya en líneas generales la política del PP (en el Euro, en el pago de la deuda, en la Unión Europea,…) mientras que el otro cuerno de la socialdemocracia encabezado por Cayo Lara se asusta ante la degradación de la situación existente y la consiguiente posibilidad de un estallido social; como Vicenç Navarro, como Juan Torres, como Alberto Garzón (los cito, por el famoso libro escrito por "el trío", palabra acuñada certeramente para ellos por Manuel Navarrete) se espanta ante la “ineptitud” de la burguesía que no comprende que se está llevando a sí misma a la catástrofe y al alimón lloran porque al actual gobierno “malo” no le sustituye uno progresista que haga las consabidas y debidas reformas, que ellos divulgan diariamente y por todos los medios posibles con una tenacidad digna de mejor causa.

De esta forma, el sector izquierdista de la socialdemocracia no encabeza los movimientos sociales que surgen por todas partes, sino, simplemente, los acompaña en la retaguardia, un poco por cumplir y otro poco por obligación (en Andalucía, sin obligación, se coaliga con un gobierno neoliberal), de la misma forma a como se va a la boda de los amigos o al entierro del compañero de trabajo: para que nos vean.

¡Ay, dignos amigos! Tener que recordaros cien años después las palabras de Lenin sobre la misión y la tarea de todo buen socialista, que no es otra que “la organización de la lucha de clase del proletariado y en la dirección de esta lucha, cuyo objetivo final es la conquista del Poder político por el proletariado y la estructuración de la sociedad socialista”. Pero quizá no sois socialistas, sino keynesianos, lo que quiere decir que sois defensores del capitalismo, o ¿acaso pensáis que Keynes era socialista? Creo que en vuestras sesudas cabezas incluso ha penetrado la idea de que aquel caballerote inglés, burgués hasta la médula, era un revolucionario de tomo y lomo.

Nuestra actual socialdemocracia, como toda socialdemocracia, lo espera todo del estado. En el origen del movimiento obrero se desarrolló el socialismo utópico, debido a la debilidad del movimiento que hacía buscar la conmiseración de dicho estado y la compasión de los capitalistas frente a la miseria del proletariado.

En un momento de auge de luchas sociales, buscar la salida de la iniquidad del presente, en lugar de en estas, en la ayuda y la reforma del estado capitalista sólo puede recibir los calificativos más denigrantes. Como dijera en 1914 Rosa Luxemburgo, la víctima de la socialdemocracia, “antes de Marx, e independientemente de él, surgieron diversos movimientos obreros y doctrinas socialistas, cada una de las cuales fue, a su manera, expresión teórica, según las circunstancias del momento, de la lucha de la clase obrera por su emancipación. La teoría que consiste en basar el socialismo en la concepción moral de la justicia, en la lucha contra el modo de distribución, en lugar de basarlo en la lucha contra el modo de producción, en la concepción del antagonismo de clases como antagonismo entre pobres y ricos, ya existían antes de ahora. Y estas teorías, a pesar de su insuficiencia fueron, en su momento, teorías efectivas para la lucha de clases proletaria. Fueron las botas de siete leguas infantiles con las que el proletariado aprendió a caminar en la escena histórica. Pero después de que el desarrollo de la lucha de clases y su reflejo en las condiciones sociales condujeron al abandono de dichas teorías y a la elaboración de los principios del marxismo, no podía haber lucha de clases socialista fuera del marxismo. Es por eso que el retorno a las teorías sociales premarxistas ya no significa retornar a las botas de siete leguas de la niñez del proletariado, sino a las débiles y gastadas pantuflas de la burguesía”.

El trío y los que propugnan una política reformista encabezada por un gobierno de izquierdas practican un socialismo primitivo, un socialismo utópico. Les conviene con toda claridad las palabras de Lenin, que adapto en su lenguaje a los nuevos tiempos, referente a los que critican “la sociedad capitalista (neoliberal), la condenan, la maldicen, sueñan con su destrucción, imaginan un régimen superior (el keynesiano), y se esfuerzan por hacer que los ricos se convenzan de la inmoralidad de la explotación.” (No sólo piensan que los ricos se convenzan de la inmoralidad de la explotación, sino que si son inteligentes y se hacen keynesianos como ellos incluso les irá mejor, porque la economía saldrá de su crisis,…).

El keynesianismo, el estado del bienestar, esa excepción que se dio en unos cuantos países europeos y EEUU después de la Segunda Guerra Mundial, en unas circunstancias especiales, y a costa de la explotación del Tercer Mundo y la destrucción de la naturaleza, es su única y milagrosa solución para todo.

Si el keynesianismo fuera factible de reestablecer (que no lo es: ni las clases del Tercer Mundo se dejan explotar, el petróleo –esa fuente de energía casi gratuita que regaló la naturaleza- está consumido y las materias primas del planeta exhaustas), quizá no lo fuera deseable moralmente. El estado del bienestar es un sueño que ya no va a venir: los capitalistas ya no pueden permitirse repartir unas migajas de los beneficios entre sus obreros como les permitió durante un tiempo el imperialismo. Y de ser posible la vuelta a aquel (imaginemos que el planeta se agrande por todos lados, que aparezcan riquezas naturales por doquier, que las revoluciones de la periferia sean contenidas,…), habría que renunciar al mal llamado estado del bienestar por inmoral: condena al hambre, la miseria y la muerte a cuatro quintos de la humanidad. Si somos socialistas, queremos el socialismo para todos. ¿Qué fue del Internacionalismo? ¿Tan difícil es comprender que los electrodomésticos que llenaron nuestras casas durante décadas es el producto de la explotación de millones de personas en el Planeta?. Nuestro objetivo es abandonar la carrera del consumismo y destrucción de la naturaleza. Transformar la sociedad del bienestar en la del buen vivir, donde haya salud, educación, trabajo, comida y una vida digna para todos los hombres y mujeres de la Tierra.

Decía el Che que tenemos tres enemigos “el primero, el imperialismo; el segundo, el imperialismo; el tercero, el imperialismo”. El “estado del bienestar o keynesiano o socialdemócrata” es producto del imperialismo, luego,…

Muchas frases y gestos, pero poca voluntad de lucha. Se precisa abandonar las frases bonitas, las buenas intenciones, las hermosas teorías que parecen explicarlo todo y luego conducen a la paralización de la acción, del deseo de ver el final de la inmoralidad financiera o ver en la Troika el origen de todos los males, y cambiar todo ello por una actitud de lucha, de organizarse, de unirse a los grandes movimientos sociales que se disparan por España y Europa, o de lo contrario estamos condenados a ser lo que los hombre y los explotados han sido siempre, las “víctimas necias del engaño ajeno y propio, y que seguirán siendo mientras no aprendan a descubrir detrás de todas las frases, declaraciones y promesas morales, religiosas, políticas y sociales, los intereses de una u otra clase. Los que abogan por reformas y mejoras se verán siempre burlados por los defensores de lo viejo mientras no comprendan que toda institución vieja, por bárbara y podrida que parezca, se sostiene por la fuerza de determinadas clases dominantes. Y para vencer la resistencia de esas clases, sólo hay un medio: encontrar en la misma sociedad que nos rodea, las fuerzas que pueden -- y, por su situación social, deben -- constituir la fuerza capaz de barrer lo viejo y crear lo nuevo, y educar y organizar a esas fuerzas para la lucha” (Lenin).

Sin embargo ni IU ni sus alrededores son capaces de detener esos movimientos, por mucho que se agiten, por mucho que busquen una solución un día y otra diferente al siguiente, buscando en lugar de los actuales, empresarios buenos que creen riqueza y no estafen, un Banco Central Europeo de nueva reglamentación que no sirva a los intereses de las clases capitalistas, una Unión Europea de los pueblos y no de las élites,…En fin, pobres víctimas del engaño propio y ajeno…

Sin embargo, no podrán impedir el desarrollo de los enfrentamientos de clase, que se recrudecerán en los próximos años, porque como decía Rosa Luxemburg (del que este artículo pretende ser un homenaje, por su lucha incansable contra todo tipo de reformismo, por su in transigencia con cualquier tipo de explotación, hasta ser asesinada por los “reformistas”) cuando se piensa que se va a lograr atraer a los capitalistas buenos y acabar con los malos, o conseguir la armonía social a través de unas bases capitalistas más justas, hay que recordarles que “la lucha de clases no es un invento marxista que se puede dejar arbitrariamente cada vez que parezca oportuno. La lucha de clases proletaria es más antigua que el marxismo, es un producto elemental de la sociedad de clases. Apareció en Europa apenas el capitalismo se adueñó del poder. El comunismo no llevó al proletariado moderno a la lucha de clases. Por el contrario, la lucha de clases creó el movimiento socialdemócrata internacional para darle objetivo y unidad conscientes a los distintos fragmentos locales y dispersos de la lucha de clases”. (Donde Rosa dice socialdemocracia, yo he colocado marxismo o comunismo, porque con la palabra “socialdemocracia”, ella se refería al socialismo revolucionario, y hoy día ha pasado a significar algo bien diferente).

Para acabar, ya que está de moda identificar “estado del bienestar” con socialdemocracia y que ese estado es una de las grandes esperanzas para muchos, una especie de regreso a un paraíso perdido, hay que recordar que el capitalismo es centenario, en tanto que el “estado del bienestar” duró una generación y sólo en un pequeño número de países. Para Vicenç Navarro, Juan Torres o Alberto Garzón (a pesar que este último gusta de decir que él lucha por el socialismo, por otra sociedad, que lo suyo es otra cosa) el estado del bienestar es norma del capitalismo y su forma neoliberal la excepción a aniquilar.

El famoso pacto socialdemócrata que siguió a la Segunda Guerra Mundial, no fue ni siquiera un pacto, pues de haber sido un pacto, el capital no hubiera acabado con él de un día a otro. Fue una concesión del capitalismo que ahora no siente la obligación de conceder y, mucho menos, una concesión impuesta por los partidos socialistas o socialdemócratas.

Una concesión impuesta por el vigor de los partidos comunistas en Francia, Italia y otros lugares (el yugoslavo, el chino, el checo, el español que con tanta bravura se enfrentó al franquismo,…) después de su gigantesca lucha en la resistencia contra los fascismos, una concesión impuesta también por el poder de unos sindicatos obreros no domesticados, por las nuevas fuerzas de liberación que se fueron desarrollando en las viejas colonias, a la fuerza de una Unión Soviética que pese a sus errores trajo el pleno empleo, la sanidad para todos y un sinfín de derechos sociales.

Ante la mojigata socialdemocracia, la burguesía no hubiera cedido en nada; fue ante los hechos anteriormente mencionados por lo que cedió y dobló el brazo. Conquistar y mantener lo conquistado siempre es producto de la lucha, y acabado el modelo soviético, vueltos archirreformistas los partidos comunistas oficiales y los sindicatos, el capitalismo vuelve a su senda normal.

Sólo una lucha internacional y tenaz (como la de Venezuela, como la de Cuba, como la de tantos lugares) podrá traer una nueva sociedad y un nuevo mundo. Poner las esperanzas en la buena voluntad del capitalismo, es darse por derrotados desde el principio y dar la batalla por perdida. No hay un capitalismo bueno y un capitalismo malo; hay un único capitalismo que conocemos de sobra.

Y acabo como empecé, recordando estas clarividentes palabras de Rosa Luxemburg “el Estado existente es, ante todo, una organización de la clase dominante. Asume funciones que favorecen específicamente el desarrollo de la sociedad porque dichos intereses y el desarrollo de la sociedad coinciden con los intereses de la clase dominante y en la medida en que esto es así. La legislación laboral se promulga tanto para servir a los intereses inmediatos de la clase capitalista como para servir a los intereses de la sociedad en general. Pero esta armonía impera sólo hasta cierto momento del desarrollo capitalista”.


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sábado, 30 de marzo de 2013

¿QUIÉN ES TONI NEGRI? Del blog de Marat




 


Corría el año 2005, dos antes de que detonase la gran crisis capitalista que hoy arroja a la miseria y a la desesperación a millones de trabajadores en los países centrales del sistema, seis antes de que apareciese de modo organizadamente “espontáneo” el fenómeno de ingeniería social del 15-M y fuera, en poco tiempo, poniendo sus huevos en forma de franquicias indignadas por medio mundo.

 

Toni Negri, con motivo del Foro Social Mundial, visitaba el Chile en el que los Chicago Boys del neoliberalismo de Milton Friedman habían hecho sus experimentos económicos durante la sangrienta dictadura pinochetista. Un autor desconocido, pero no por ello, menos interesante en el desenmascaramiento de este profeta de los “indignados” que cacarean, como loros de pico desatado y descerebrada cabeza, en místico arrobamiento cada uno de sus vacíos y tramposos conceptos, al igual que los del esotérico Žižek, y que hacen el caldo gordo al capital que los maneja como títeres con cabeza de serrín; este autor, como antes decía, explicaba bien la biografía político-ideológico del apóstol de la contrarrevolución, Toni Negri.

 

¿Quién quiera entender que entienda y quien no, que siga agitando sus pacifistas manitas en las performances del movimiento-viaje a ninguna parte.


Les dejo, sin más con el texto:

 

¿QUIÉN ES TONI NEGRI Y PORQUÉ VISITÓ CHILE?


Un apagafuegos de la lucha de clases


Texto distribuido antes, durante y después del Foro Social Mundial

 

En un día especial para la izquierda burguesa, uno de los ideólogos más prestigiosos de los últimos tiempos, un precursor de "nuevas" ideas, de nuevos conceptos, visitó por fin Chile, ese gran "laboratorio" del capitalismo mundial.

 

Título original: ¿QUIÉN ES TONI NEGRI Y POR QUÉ ESTÁ AQUÍ?

En torno a los inventores de nuevos valores gira el mundo, gira de modo invisible. Sin embargo, en torno a los comediantes giran y se retuercen el pueblo y la fama; y así marcha el mundo” - Nietszche.

 

Desde joven Toni Negri soñó con ser dirigente intelectual de la clase trabajadora. La historia le dio su oportunidad: poco después de titularse como filósofo, la lucha de clases experimentó un notable ascenso en todo el mundo. En esa época (los años 60) los proletarios confiaban bastante en su propia capacidad de lucha, así que les tenía sin cuidado que un intelectualillo pretencioso se metiera en las fábricas a decirles lo que tenían que hacer. Esa actitud despreocupada de los obreros le permitió a Toni conocer la realidad de los centros industriales de Italia, donde los trabajadores acostumbraban hacer huelgas salvajes, quemar los autos de sus jefes, apalear a los soplones y cosas así. De esos combates, Toni sacó una conclusión banal, pero que anunció como su gran descubrimiento teórico: en los lugares de trabajo está el epicentro de las luchas contra el régimen salarial y la ganancia capitalista. Naturalmente, los explotados siempre han sabido esto; pero a Toni le gustaba retorcer las palabras para ganar notoriedad pública. Así, supo servirse del movimiento Autonomía Obrera (una corriente semi-anarquista, amorfa y heterogénea), para hacerse notar como un "intelectual comprometido".

 

A mediados de los 70 la lucha de clases en Italia alcanzó altísimas temperaturas, produciendo diversos agrupamientos combativos del proletariado. Grupos como Insurrección, la sección italiana de la Internacional Situacionista y las Brigadas Rojas, trataron de estimular la lucha mediante clarificaciones teóricas y acciones de propaganda armada. Toni llevaba algunos años moviendo los hilos del grupo Poder Obrero, pero era casi desconocido en los ambientes más extremistas del proletariado italiano. Para solucionar ese problema se hizo fotografiar y entrevistar por cuanto periodista se le cruzara por delante, hasta que su nombre empezó a sonar en la prensa. El resultado de esa fama fue bien grotesco: cuando a fines de los 70 las fuerzas represivas se abalanzaron sobre el movimiento para aniquilarlo, escogieron al pobre Toni como chivo expiatorio para darle una lección al proletariado. En una atmósfera de paranoia, delaciones, arrepentimientos y montajes, Toni Negri fue acusado de ser el ideólogo de las Brigadas Rojas y del secuestro y asesinato del líder democratacristiano Aldo Moro (atentado que las Brigadas Rojas perpetraron cuando ya estaban infiltradas y bajo el control de la policía secreta). En realidad nadie en las Brigadas Rojas conocía a Negri, y el asesinato de Moro había sido organizado por los partidos gobernantes para contener la crisis. Pero Toni el Astuto supo aprovechar la oportunidad que se le ofrecía: organizó una campaña de apoyo centrada en él mismo (cuando en Italia había miles de luchadores sociales en prisión); y se defendió a medias, dando a entender que no era un terrorista pero que tampoco era del todo inocente. Entonces se hizo famoso.

 

Toni pasó cuatro años a la sombra. En 1983 sus seguidores aprovecharon un resquicio legal para sacarlo de la cárcel: lo llevaron a las elecciones parlamentarias como candidato del Partido Radical, salió elegido diputado y el fuero parlamentario le permitió salir en libertad sin más trámite. Luego se exilió en Francia, donde se vinculó con la elite intelectual posmoderna. En ese ambiente escribió su primer superventas: Marx más allá de Marx, donde afirmó que El Capital, la conocida obra de Marx, había llevado al proletariado a la derrota. Esa estupidez le valió un gran reconocimiento por parte de la izquierda, que calificó su libro como “uno de los documentos más cruciales del marxismo europeo” (por esa misma época la izquierda describía a Foucault como el pensador más crítico del mundo, por haber dicho que el capitalismo jamás podrá ser abolido). En realidad a la burguesía progresista de Europa le importaba poco la calidad teórica de Negri, pero vio en él a un charlatán que podría serle de gran utilidad en su guerra ideológica contra los proletarios. Y eso fue lo que pasó. Veamos: cuando Negri entró por primera vez en contacto con las luchas proletarias, éstas tenían un nivel de combatividad tan alto, que sólo cabía decir: “Marx tenía razón: en la fábrica está la lucha contra el trabajo asalariado y la propiedad”.

 

Toni sólo estaba repitiendo lo que todos los teóricos marxistas siempre habían sabido: que los combates de la clase obrera en los lugares de trabajo eran y debían ser el eje de la lucha social. ¿Qué pasó entonces? La reacción lanzó una violenta campaña de terrorismo encubierto, infiltró soplones y provocadores en los medios insurgentes, metió drogas en los barrios pobres y organizó una oleada de despidos en las fábricas más conflictivas. Entonces quedó claro que el “obrerismo” de los marxistas italianos como Tronti y Panzieri -enfoque que Negri repetía como un loro- era insuficiente para explicar el carácter de la lucha y su derrota. Algunos intentaron desentenderse del fracaso aprobando el “compromiso histórico” entre estalinistas y demócratacristianos. Otros siguieron viviendo y luchando oscuramente entre los explotados, pues comprendieron que las explicaciones tendrían que surgir del propio movimiento obrero, obligado a asimilar el desastre para retomar la ofensiva. ¿Qué hizo Negri, además de aprovechar la derrota para convertirse en una celebridad? Guardó silencio.

 

Aunque sería más exacto decir que, además de quedarse callado para no tener que hablar de su vergonzosa conducta, llamó a los proletarios a callarse también, afirmando que “la memoria proletaria es sólo la memoria de la alienación pasada: la transición comunista es la ausencia de memoria”. En el preciso instante en que escribió eso, Negri se convirtió en un colaborador de la policía. Pero no se quedó ahí. Al mismo tiempo que llamaba a los explotados a olvidar su propia lucha, Toni el Memorioso aprovechaba la tranquilidad de la prisión para estudiar la historia del pensamiento político moderno. No intentó ningún balance de la desesperada lucha que se libraba en las calles y fábricas, ninguna explicación de la derrota, ninguna propuesta para reconstruir el movimiento obrero. Pero ¿qué más se podía esperar? Toni Negri no es un militante revolucionario ni un estratega de la lucha comunista; es un pensador a sueldo, un metafísico y un oportunista: un títere. Por eso no aportó ningún análisis concreto sobre el desarrollo de la lucha de clases, ni sobre una estrategia de combate internacional de los explotados: en lugar de eso Negri se pasó la década del 80 especulando sobre “poder constituyente”, “multitud”, y “subjetividad radical”; tratando de combinar teoría revolucionaria con teoría contrarrevolucionaria, comunismo con posmodernismo, fuego con agua... ¿Cómo se le pudo ocurrir a nuestro Profesor esa estúpida amalgama?

 

Cuando la lucha proletaria iba en ascenso, Negri describió el capitalismo como una dominación política sobre el proceso de producción en el lugar de trabajo, y las ocupaciones y huelgas como combates directos contra el régimen salarial y la propiedad (todo eso era marxismo para escolares). Más tarde Toni se dio cuenta de que el dominio capitalista se extendía más allá del lugar de trabajo, sobre todos los aspectos de la vida cotidiana, cosa que los situacionistas habían comprendido antes y mejor que él. Entonces vino la derrota, y Negri, que no había hecho ninguna contribución real al movimiento, decidió que los culpables del fracaso eran los propios obreros, quienes al luchar por salarios más altos y por el control de la producción se habrían hecho “cómplices de la estafa capitalista”. Marx nunca idealizó a los asalariados; sólo dijo que eran la principal fuerza revolucionaria porque al estar ubicados en la base de la producción capitalista, podían hacerla saltar en pedazos si convertían su lucha económica en una lucha política para tomarse el poder. Ese fue el salto que los trabajadores no dieron en Italia y el resto del mundo en la crisis de los 70, y esa debilidad es lo que había que explicar para superarla en los próximos combates.

 

Pero eso era demasiado para el Profesor Negri. Su solución fue mucho más simple: despreció a los proletarios asalariados que antes amaba (los llamó “obreros masa”) y se enamoraró de los proletarios no asalariados: estudiantes, desempleados, precarios (los “obreros sociales”), descritos ahora como el “nuevo sujeto autónomo”, la fuerza motriz de la revolución, la “multitud”. El problema de su “teoría” es que no da ninguna orientación sobre cómo organizar la lucha de ese proletariado difuso, ni contra qué dirigirla, ni con qué fin preciso. Mientras la lucha de los trabajadores amenaza directamente la base productiva del capital, la lucha de la “multitud” se reduce a elegir entre diversos estilos de vida dentro de la sociedad actual, disolviéndose en una multiplicidad de resistencias superficiales, estéticas y simbólicas, sin finalidad ni estrategia común, y por lo tanto inofensivas para el orden capitalista. Estas “resistencias autónomas” teorizadas por Negri equivalen a la “microfísica del poder” de Foucault, pero en lenguaje marxista.

 

La admiración de la burguesía hacia ambos personajes no es ninguna coincidencia: Foucault criticó al marxismo diciendo que la lucha de clases era un asunto del pasado y que sólo hay microrrelaciones de poder, localizadas y dispersas, que sólo pueden ser contestadas con microprácticas de resistencia local, etc. Negri por su lado afirmó que el propio Marx había definido la lucha de clases como un asunto de pequeñas resistencias dispersas, descentralizadas y locales, y que las grandes ideas sobre la lucha de clases no habían sido más que un malentendido. Más allá de lo imbéciles que sean esas afirmaciones, lo cierto es que a mediados de los 80 los millonarios de todo el mundo necesitaban escuchar cosas así: suaves, pequeñas y tranquilizadoras, porque todavía temblaban de miedo a causa de los últimos enfrentamientos de clase. Por eso no dudaron en financiar los libros, revistas, cátedras y viajes que quisiera hacer el distinguido Profesor Negri, con tal de que siguiera produciendo su chatarra ideológica. Tal coincidencia de intereses entre el filósofo y los inversionistas le fue dando forma al autonomismo de Negri: una vulgar mezcla de retórica marxista, palabrería posmoderna y misticismo barato.

 

En otras palabras: la fraseología radical de Negri esconde su servilismo a los intereses del capital. Ya a principios de los 80 su afinidad con Foucault se daba en un momento en que éste defendía el uso de drogas como una forma de “resistencia al poder”, mientras todos los Estados fomentaban el consumo de narcóticos para liquidar al proletariado insurrecto. Más tarde, en su libro Imperio, Negri dijo que el aislamiento entre las diversas luchas y la ausencia de estructuras organizativas es la mayor fuerza de los trabajadores, cuando en realidad esas limitaciones los han llevado una y otra vez a las más sangrientas derrotas. Asimismo, al decir que la lucha de clases ha sido superada por una realidad “híbrida, plural, flexible, multicultural”, Negri insinúa que la sociedad ha ido más allá del capitalismo, que las clases en pugna se han fundido en una “multitud deseante” y que el enemigo está “en todas partes y en ninguna”, lo cual no significa nada. Cuando describe al “Imperio” y a la “multitud”, el Profesor Negri celebra las debilidades del proletariado y las fortalezas del capital, y ni siquiera en eso es original, porque sólo repite los viejos temas del liberalismo burgués: hace desaparecer a la clase trabajadora en una masa amorfa de sujetos singulares con intereses autónomos; reduce la lucha social a un agregado caótico de resistencias localizadas; niega la posibilidad de destruir violentamente las estructuras capitalistas; reemplaza toda consideración estratégica del enfrentamiento social con ideas metafísicas sobre la singularidad del individuo, la potencia infinita de la voluntad, la omnipresencia del poder, etc. Negri es un idealista demócrata.

 

¿Por qué Negri es constantemente invitado a conferenciar en Foros Sociales “alternativos” y en universidades progresistas? Porque su palabrería confusa y vacía sirve al izquierdismo burgués en su lucha ideológica contra las masas. Así, por ejemplo, cuando en el 2002, en medio de una violenta crisis, el problema central del proletariado argentino era unificar su lucha en un sentido claramente anticapitalista, Negri dijo que “lo importante es discutir las formas de gestión colectivas, toda la atención está sobre las formas de gestión”. Consecuente con esta visión cretina, en su libro Imperio Negri afirma que el objetivo de los oprimidos no es resistir a los procesos de la mundialización mercantil, sino “reorganizarlos y redirigirlos hacia nuevos fines". Pero dichos procesos, que surgen del modo de producción capitalista, inevitablemente fortalecen a las clases dominantes y debilitan al proletariado, y es imposible “reorganizarlos” en torno a “nuevas formas de gestión”.

 

Negri, al reducir la lucha a un problema de “formas de gestión”, está afirmando que la lucha proletaria no debe superar el nivel económico ni plantearse la superación del capitalismo como objetivo político general. Ese énfasis en las formas inmediatas en desmedro del contenido histórico de la lucha es la negación absoluta de lo que han afirmado siempre los comunistas revolucionarios. Negri está llamando a los trabajadores a resignarse. Y para hacernos tragar su mierda reformista, quiere convencernos de que no estamos determinados por la esclavitud asalariada y la producción de mercancías, sino por la “producción de lenguajes y de subjetividad” en un mundo de “trabajo inmaterial”. ¿Esclavos asalariados? Nada de eso. Según el Profesor Negri, debemos reconocernos como una “multitud” que lucha no para destruir el actual modo de producción, sino para expresar su subjetividad y para autogestionar las relaciones capitalistas. Los piquetes, ocupaciones y asambleas están bien para él, siempre que no pasen de la autogestión de lo existente, siempre que no superen los límites del buen entendimiento democrático y civilizado, donde los capitalistas siempre ganan.

 

¡Pobre Toni, no puede soportar la visión de las terribles luchas que se avecinan! Para conjurar esa pesadilla, visitó a los piqueteros argentinos y pocas horas después a los políticos que ordenaron la brutal represión contra ellos, ¡y a todos los felicitó por su desempeño! ¡Negri, pobre desgraciado! Con su sonrisa helada llamó a los proletarios argentinos a luchar de forma pacífica al mismo tiempo que brindaba con los burócratas que recién habían ordenado disparar contra ellos. Así es Toni Negri, esa basura contratada para confundir y desarmar a los explotados: amigo de piqueteros, asambleístas, empresarios y policías. Por eso el New York Times, bastión mundial de la propaganda burguesa, describió su libro Imperio como “la próxima Gran Idea”; por eso el best-seller fue publicado por la universidad de Harvard, semillero de ideólogos liberales, y por eso la reaccionaria revista Time lo calificó como “el libro inteligente del momento”. Por eso cuando Negri fue a conferenciar a la fábrica ocupada Grissinópolis en Argentina, ningún obrero quiso escucharlo y tuvo que parlotear frente a un pusilánime auditorio de reporteros, académicos y activistas pagados. Por eso las muertes de violadores y asesinos con uniforme europeo en Irak le hacen llorar. Y por eso, porque es un apagafuegos de la lucha de clases, está hoy día en Chile.

 

En Chile los patrones de izquierda y de derecha temen que los explotados volvamos a levantarnos. Saben que cuando llegue nuestra hora haremos mucho más que gritar “que se vayan todos”. Por eso la izquierda burguesa trae a Negri para atontarnos con sus mentiras. Igual que en 1973, nos tienen miedo y quieren mantenernos sometidos. Hoy día usan contra nosotros la basura ideológica de Toni Negri, pero cuando eso ya no sirva van a usar balas de plomo... Por todo esto, hombres y mujeres del proletariado: ¡Basta de rumiar ideologías adormecedoras! ¡Hay que prepararse para combatir!.

 

viernes, 29 de marzo de 2013

Los Willy Toledo salmantinos



Por Shangay Lily  Jueves, 28 de Marzo de 2013

 


Una de las noticias difamatorias

Así, con ese titular de película de Ozores o de No-Do franquista ha intentado criminalizar La Gaceta de Salamanca a los profesores que han criticado la prohibición del acto de "Alfon" en la Universidad de Salamanca.

Cinco profesores de la Universidad, los Willy Toledo salmantinos, así, con ese titular de película de Ozores o de No-Do franquista o de propaganda aterrorizadora de Queipo de Llano, ha intentado criminalizar ahora La Gaceta de Salamanca a los cinco profesores que han firmado el Manifiesto por la libertad de expresión en la Universidad y contra la prohibición del acto de Alfon en la Universidad de Salamanca (que a estas alturas va por 500 firmas de personalidades relevantes del mundo académico, intelectual y de la cultura). Ese cómico titular apareció en la posterior edición digital, en la edición impresa ya habían sacado las fotos por si alguien se animaba a insultarles o algo. En la impresa también habían destacado y aislado a un profesor de la Pontificia como caso de pura herejía. El magnífico José Sarrión Andaluz es el valiente, lúcido e informado profesor que se solidarizó desde la Pontificia (el resto debe estar perdido en los altares, sin enterarse de lo que pasa en la tierra, entre la chusma estudiantil).

Que el medio de comunicación propaganda sea propiedad de personajes del PP no debe extrañar, pero que evidencie tan claramente sus nexos con grupos neonazis (los que iniciaron esta caza de brujas) así como sus tácticas antidemocráticas ya es más preocupante. Intentar perjudicar a los profesores que han denunciado esta censura fascista del medio de comunicación y de la Universidad es una táctica tan sucia que sólo se le habría ocurrido a esos curitas que fusilaban ellos mismos a los rojos republicanos tras bendecirles. La represión de la libertad y la campaña de miedo y delación está siendo una estrategia preventiva del PP que no acaba de cuajar.

Las tácticas de criminalización de los movimientos sociales hace mucho que ha rebasado lo democrático, lo legal y lo decente, pero este acoso y difamación de la figura de Alfon y otros tantos jóvenes ligados a movimientos sociales está entrando en territorio franquista directamente. Copiando la amoral estrategia de La Razónque, saltándose todas las leyes democráticas de derecho a la intimidad y el honor,sacó la foto y nombres de los líderes estudiantiles en la huelga contra los recortes de Educación que se oponían a la oligarquía corrupta que paga las cuentas de estos panfletos y les señaló para ver si sus grupos de extremistas neonazis o, peor aún, neofranquistas, le “ajustaban las cuentas” por “pensar demasiado”.

Estas maneras mafiosas que la derecha sigue practicando con total impunidad en este estado infectado de magistrados, potentados, políticos y altos cargos franquistas o hijos de franquistas, han dejado en evidencia todo aquél cuento de la ejemplar transición sin derramamiento de sangre. Como bien dice el gran Julio Anguita: “La transición sólo fue una transacción”.

De no ser así sería inexplicable que se conculquen los derechos de unos profesores pueden profesar la opinión que deseen por libertad de cátedra y que sólo pueden ser castigados demonizándoles, criminalizándoles en medios de comunicaciónpropaganda de la derecha que confunde al lector lanzando ambiguas acusaciones incomprensibles que les haga parecer traidores a algo cuando están defendiendo loq ue toda la universidad, su rector el primero, debería defender: la libertad de expresión , la información, el conocimiento, la cultura para poder formar una opinión sus estudiantes.

Pero ya hace tiempo que el PP y sus marionestas (un saludo señor Rector) se dedican a difamar a todo aquel que pueda desenmascarar este robo del estado de bienestar y de los derechos del pueblo. Es lo que hacen con Alfon acusándole de algo que se ha demostrado ya como falso y por lo que la policía debería pedir perdón al injuriado. La policía detuvo al portador de los explosivos y quedó ya patente antes del juicio que Alfon jamás llevó explosivo alguno. Pero estos medios de comunicación criminalización siguen mintiendo, confundiendo y difamando a los solidarios y ocultando, negando, invisibilizando a los ladrones, homicidas (un saludo Carromero), asesinos (un saludo banqueros que desahucian) y corruptos (un saludo a todas las monarquías, iglesias y multinacionales).

El rector justificú su censura

La Gaceta Mofeta de Salamanca se dedicó a esparcir su hedor para distraer de la verdadera basura, a difamar a un chaval que lo único que ha hecho es comprometerse con su tiempo, su sociedad y los débiles. Sacaron otra vez esos antecedentes policiales que sólo demuestran que la policía lleva tiempo intentando acusar a Alfon de todo y nunca lo han podido demostrar. Difama que algo queda.

Ante estos gravísimos hechos, hace unos días el Colectivo Estudiantil Alternativo (CEA) leyó en el Consejo de Gobierno de la Universidad de Salamanca, órgano en el que tiene 5 consejeros de los 6 que hay reservados a estudiantes, este magnífico discurso:

COMUNICADO ANTE LA REPRESIÓN DEL ACTO DE “ALFON”

El día viernes 22 el Colectivo Estudiantil Alternativo tenía previsto celebrar un acto sobre “la represión de los Movimientos Sociales” que contaba con la participación de uno de las personas que ha sufrido una mayor represión de los últimos meses debido a que fue detenido y llevado a prisión durante 56 días permaneciendo en aislamiento sin haber tenido un juicio previo al encarcelamiento.

No había ningún problema con la celebración del acto hasta que un grupo neonazi externo a esta institución, haciéndose pasar por estudiantes de la USAL, y un periódico conocido por linchar a Decanos de esta Universidad cada vez que aprueban una actividad que no les gusta, decidieron intervenir. El rectorado ha optado por ceder ante éstos, prohibiendo la realización del acto en la Universidad con la excusa de que, y cito literalmente, “el joven madrileño no cumple con los requisitos de relevancia personal y profesional “ (Salamanca Universitaria. Editorial del día 20/03/2013).

Es curioso que se realice semejante juicio de valor sobre una persona el mismo día que se cedió Fonseca al señor Kiko Rivera, más conocido como Paquirrín, para que actuara “mostrando su faceta de DJ” (Salamanca24horas. Editorial del día 20/03/2013).

No es la primera vez que CEA ha de enfrentarse a este tipo de acusaciones ni a presiones venidas desde estos mismos grupos, pero sí que es la primera vez en su historia, que cuenta ya con casi 20 años, en la que un Rector de esta Universidad cede ante estas absurdas acusaciones obligando a que un decano revoque un permiso que ya nos había sido concedido por presiones externas a esta institución. Por eso, queremos recordarle al señor rector que:

1) Es rector de una universidad pública, y que tal y como define el DRAE (diccionario de la Real Academia Española) en su acepción 4, público quiere decir “perteneciente o relativo a todo el pueblo”.

2) Ceder ante estas presiones afirma y legitima las acusaciones vertidas hacia gran parte de la Comunidad Universitaria a la que usted está representando. Y no sólo nos estamos refiriendo al estudiantado, sino también a profesores de la USAL que han defendido nuestra postura y que también han sido criminalizados y difamados por un medio de comunicación carente de cualquier tipo de deontología profesional, y por un pequeño pero influyente sector de la sociedad salmantina que hace de la intolerancia, del discurso único y de las actitudes inquisitoriales sus principios rectores.

3) CEA siempre hemos defendido una Universidad al servicio de la sociedad, y esto implica estar abiertos al debate plural. Durante la dictadura, la Universidad fue una isla de libertad en la que los perseguidos por el régimen podían expresarse e intercambiar ideas, al margen de las presiones del poder político. Entendemos que esta función social es parte indispensable de la esencia universitaria. Creemos también que la universidad ha de ser el medio por el que los alumnos adquieran un pensamiento crítico, más necesario hoy día que nunca. Esto hace que los estudiantes de una Universidad crezcan, como personas y como profesionales. La Universidad de Salamanca, como institución pública que es, debe fomentar y favorecer el conocimiento por parte del conjunto de la sociedad de las diferentes opiniones y opciones existentes, sin más limitaciones que el respeto a la diversidad y la tolerancia.

4) Las leyes de este país afirman que una persona es inocente hasta que se demuestre lo contrario, y, a día de hoy, no existe ninguna prueba incriminatoria hacia el que iba a ser el “conferenciante” principal, por lo cual todas las acusaciones vertidas hacia él, y por lo tanto, hacia nosotros, son absolutamente falsas. Se ha vulnerado el principio de presunción de inocencia, creando un ruido mediático que finalmente se ha impuesto sobre cualquier posibilidad de diálogo racional.

5) La Universidad de Salamanca, como institución patrimonio del conjunto de la sociedad salmantina y universal, debe favorecer que todos los ciudadanos independientemente de su formación académica y/o profesional puedan participar de la vida universitaria y por ello no compartimos el criterio de que solo los que posean “relevancia profesional” pueden participar en los debates organizados en el seno de la Universidad.

6) Desde el Colectivo Estudiantil Alternativo (CEA) consideramos necesario recordar al Señor Rector, que la Universidad de Salamanca pertenece no al Equipo de Gobierno que él preside, ni siquiera a la comunidad universitaria, sino al conjunto de la sociedad, que es la que financia con sus impuestos los gastos de la institución, y por ello en su seno debe tener cabida, de una forma u otra, todas las personas independientemente de su “relevancia profesional”, es más, se debe habilitar espacios para que cualquier ciudadano se sienta parte de esta institución, lo contrario es apostar por una universidad propiedad de las élites intelectuales o económicas, filosofía que nunca hemos compartido desde el Colectivo Estudiantil Alternativo (CEA).

7) El Colectivo Estudiantil Alternativo (CEA) desde sus orígenes, ha sido una asociación donde quien marca su actividad y objetivos son los estudiantes de la Universidad de Salamanca y no los diferentes Equipos de Gobierno que rigen la Universidad en cada momento. Por ello no podemos aceptar que desde el rectorado se nos pretenda imponer qué tipos de actos organizamos y que personas intervienen en los mismos y ni mucho menos si tenemos o no derecho a utilizar las instalaciones de la Universidad, derecho que nos han otorgado los estudiantes con sus votos en los diferentes procesos electorales, el último de los cuales nos otorgó la condición de asociación estudiantil mayoritaria en la Universidad de Salamanca y nos ha permitido tener más de cuarenta representantes en el Claustro Universitario.

8) No parece usted comprender, Sr. Rector, el enorme problema al que la Universidad se enfrenta como institución desde hace unos años. Nuestro gobierno ya ha humillado a la Universidad bastante recortando su presupuesto, provocando despidos de profesores, endureciendo los requisitos para acceder a las becas generales, destruyendo las Becas Séneca y elevando las tasas académicas a precios insultantes para una sociedad con un 25% de paro. Ahora, además, también puede modificar su calendario de actividades a través de sus lobbys de presión. Y mientras hablamos, el Gobierno ultima una reforma de la educación primaria y secundaria que recortará financiación a los colegios e institutos de los barrios de clase trabajadora, reduciendo así el número de estudiantes universitarios. Y lo que le molesta al ministro Wert es la respuesta estudiantil que se está produciendo. Señor Rector, la derecha salmantina no ha cargado contra CEA por organizar este acto, sino por ser la voz crítica con el Gobierno en esta Universidad.

Además, Señor Rector, la prohibición del acto es contraria a Derecho, es manifiestamente ilegal. Recordamos que la actividad prohibida estaba organizada por CEA, una asociación representativa y además mayoritaria en la Universidad de Salamanca.

El artículo 31 del Reglamento de la representación de los estudiantes en la Universidad de Salamanca, aprobado por este Consejo de Gobierno el 21 de diciembre de 2006, establece lo siguiente:

“Las Asociaciones de Estudiantes (…) podrán utilizar, previa comunicación al Decanato o Dirección del Centro, aulas u otras dependencias de los Centros para la celebración de asambleas, reuniones u otras actividades en el ámbito de su competencia”.

El acto prohibido no se enmarca en la programación académica de la Universidad, sino que se trata de una actividad que organiza una asociación de estudiantes de esta Universidad.

Y fíjense si se trata de una actividad que entra dentro de nuestras competencias, que en el Estatuto del Estudiante Universitario, aprobado por Real Decreto 1791/2010, de 30 de diciembre, en su artículo 38, se afirma que las universidades impulsarán “la participación estudiantil en asociaciones y movimientos sociales, como expresión de la formación en valores de convivencia y ciudadanía”. Señor rector, la actividad prohibida pretendía analizar la realidad de los movimientos sociales, es decir, fomentar la participación estudiantil abordando los problemas de la realidad social.

Por tanto, de acuerdo con la normativa, una asociación universitaria sólo tiene que comunicar las actividades que realiza en las instalaciones universitarias al Decanato. Nada tiene que decir el Rectorado al respecto.

Con esta prohibición se ha vulnerado el derecho que tienen los estudiantes, reconocido en el artículo 7.1 r) del Estatuto del Estudiante Universitario, “a la libertad de expresión, de reunión y de asociación en el ámbito universitario, exenta de toda discriminación directa e indirecta, como expresión de la corresponsabilidad en la gestión educativa y del respeto proactivo a las personas y a la institución universitaria”.

Señor rector, no se trata de una actividad enmarcada en la programación académica de la universidad, sino de un acto que organiza una asociación de estudiantes y que por ello puede celebrarse en la universidad. Porque la representación estudiantil es un derecho, señor rector. Nada importa la relevancia del ponente para que este tipo de actos se celebre. Pero, en cualquier caso, es falso que no tenga relevancia. Muchos parlamentarios[1] de nuestro país, de muy diversas ideologías, han apoyado la causa de Alfon, pertenecientes a partidos como el PSOE, Izquierda Unida, Iniciativa per Catalunya, la Chunta Aragonesista, Esquerra Republicana per Catalunya, el BNG, Coalición Canaria y Compromís, y más de 150 colectivos sociales de distintos países también[2].

Señor rector, con su decisión no sólo ha vulnerado la normativa administrativa, sino que al prohibir de forma arbitraria por la ideología que representa CEA y la actividad en cuestión, su prohibición vulnera el derecho fundamental a la igualdad y no discriminación por razón de ideología, así como el derecho fundamental a la libertad de expresión, reconocidos en nuestra Constitución.

Por todos estos motivos, señor rector, queremos expresar nuestra decepción ante su actuación, que ha terminado perjudicando enormemente la imagen de la Universidad. La prohibición de este acto ha sido un escándalo para una buena parte de la comunidad universitaria española. Prueba de ello son los cientos de personas que han firmado estar en desacuerdo con su decisión, y que consideran desafortunadas sus palabras.

Han criticado su decisión 20 catedráticos y 100 profesores de universidad, entre ellos el ex Rector de la Universidad Complutense de Madrid, Carlos Berzosa, quien nos recordó las palabras de Unamuno al comienzo de su famoso discurso en el Paraninfo de la Universidad de Salamanca el 12 de octubre de 1936: “estáis esperando mis palabras. Me conocéis bien, y sabéis que soy incapaz de permanecer en silencio. A veces, quedarse callado equivale a mentir. Porque el silencio puede ser interpretado como aquiescencia”.

Ha criticado su decisión el hombre que mejor comprende la libertad en nuestro país: el poeta salmantino Fernando Macarro, más conocido como Marcos Ana, candidato al Premio Principe de Asturias de la Paz, quien pasó 23 años en las prisiones franquistas, y que nos ha recordado que él “siempre estará del lado de quienes defienden la libertad”.

Han criticado su decisión personas muy relevantes de la cultura de nuestro país, como la ex Directora de la Biblioteca Nacional de España Rosa Regàs, el dramaturgo Alfonso Sastre, el político Julio Anguita, el activista gay Shangay Lily, el periodista Ignacio Escolar, el escritor Santiago Alba Rico, el cantaor flamenco y premio nacional Juan Pinilla, el escritor Carlo Frabetti, el catedrático de economía Juan Torres, el actor ganador de un Goya Alberto San Juan, el actor Guillermo Toledo, el humorista gráfico Carlos Azagra, el activista social Javier Couso, el director de El Viejo Topo Miguel Riera o el periodista Javier Gallego.

Han criticado su decisión 17 colectivos de la sociedad salmantina: Federación de Vecinos de Salamanca (FEVESA), la Asociación Desarrollo Comunitario Buenos Aires (ASDECOBA), el comité de Bici Urbana Guardabarros, el Comité Antinuclear y Ecologista, la Confederación General del Trabajo (CGT), Comisiones Obreras (CCOO), la plataforma “Hay alternativas”, el Foro por la Memoria de Salamanca, el Colectivo Feminista 13 Rosas, STOP Desahucios, el Partido Comunista de Salamanca (PCE), Izquierda Republicana (IR), La Izquierda de Salamanca (IZSA), EQUO, Izquierda Unida (IU) y Juventudes Comunistas (UJCE). La gravedad de este hecho es tal que la diputada Caridad García ha registrado una pregunta en el Congreso de los Diputados dirigida al Gobierno, y en la que su Grupo Parlamentario estima que “que estos hechos y declaraciones son gravísimas, además de decepcionantes, tanto por la falta de actitudes democráticas demostradas, como que ocurra esto en una universidad pública que se supone que defiende los derechos sociales y que está al servicio del conocimiento, pero que al final, y esto es lo peor, ha cedido a un chantaje de un colectivo neonazi convirtiendo un acto contra la represión en un acto represaliado”.

Han criticado su decisión catedráticos, profesores e investigadores de las Universidades de Valencia, Sevilla, Barcelona, Autónoma de Barcelona, Autónoma de Madrid, Complutense de Madrid, Oviedo, Castilla-La Mancha, Granada, Pontificia de Chile, Carlos III de Madrid, Politécnica de Madrid, Pompeu Fabra, Alcalá de Henares, Vigo, Alicante, Cádiz, León, Valladolid, Málaga, Córdoba, Sevilla, Rey Juan Carlos, Pablo de Olavide, Internacional de Andalucía, Politécnica de Cartagena, el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Universidad de Quintana de Roo (México), Universidad Autónoma de Chiapas (México), Universidad de Illinois (Chicago, USA), Universidad de Buenos Aires (Argentina), Universidad Nacional de Rosario (Argentina), Binghamton University (Nueva York, USA), y Harvard School of Medicine (Boston, USA).

Por todo lo expuesto, Señor Rector, instamos a la Universidad de Salamanca y especialmente a su equipo de Gobierno a que haga una valoración crítica de su forma de actuar en el presente caso y que en el futuro apueste por una universidad abierta, plural, tolerante y donde el debate y la confrontación de ideas sea algo enriquecedor para el conjunto de la sociedad.

Salamanca, a 25 de marzo de 2013.

Colectivo Estudiantil Alternativo (CEA)





Para terminar, la denuncia que los Bukaneros (si hay un colectivo criminalizado por defender el estado de derecho es este… un saludo Cifuentes, ¿has visto a tu marido o sigue en desconocido paradero?) hicieron en el partido que hubo unos día después en el Estadio de Salamanca. Pusieron en evidencia el doble rasero partidista del Rector que había prohibido la charla de Alfon sobre “Criminalización de movimientos sociales” por no tener “relevancia profesional” (A ver si alguien puede hablar sobre criminalización de movimientos sociales con mayor conocimiento que Alfon) y por otro lado le cedió el edificio Fonseca a un personaje como Francisco Rivera “Paquirrín” para que pinchase como estrella… ¿él si tiene “relevancia profesional” señor Rector Rectal?

 


PD: A pesar de la censura, Alfon y su madre Elena hablaron en Salamanca. Fue en la CGT y tenemos un vídeo para que podáis disfrutar de su lucha y del compromiso ejemplar de las y los estudiantes de Salamanca.

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