Por Fernando Arellano Ortiz
Entrevista
con Xabier Arrizabalo Montero, profesor de
economía aplicada de la Universidad Complutense de Madrid: “La salida a la
crisis del capitalismo solo puede ser el resultado de que aquellos que vivimos
de nuestro trabajo abramos una alternativa en positivo”.
No hay alternativa de superar la
profunda crisis civilizatoria dentro del brutal esquema de ajuste que impone el
capitalismo, sostiene el economista español, sociólogo y docente universitario
Xabier Arrizabalo Montero, quien estuvo en Bogotá y en Quito cumpliendo
compromisos académicos.
En la
capital colombiana este profesor de economía aplicada de la Universidad
Complutense de Madrid dio una conferencia en la sede del partido Polo
Democrático Alternativo, sustentada en su libro Capitalismo y economía mundial.
Bases teóricas y análisis empírico para la comprensión de los problemas económicos
del siglo XXI, editado en 2014.
Igualmente,
en la capital del Ecuador, Arrizabalo Montero disertó sobre el convulso
contexto actual de la economía mundial, caracterizado por la persistencia de la
crisis, en el Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN), la universidad de
posgrados del Estado.
El
imperialismo, los límites del capitalismo y la crisis civilizatoria como
encrucijada histórica fueron los tópicos analizados en sus charlas en estos
países suramericanos por este analista económico.
En su
opinión, “lo que constatamos es la universalización de las políticas de ajuste
que tratan de ser la respuesta a la crisis pero que al final no hacen sino
contribuir a que la economía desemboque en una crisis aún más aguda”.
Para
profundizar en estos temas, el Observatorio Sociopolítico
Latinoamericano www.cronicon.net, dialogó ampliamente con Arrizabalo
Montero, aprovechando su paso por Bogotá.
PARA LOS
NEOLIBERALES LA QUE ESTÁ EQUIVOCADA ES LA REALIDAD Y NO SU INTERPRETACIÓN
– En el
capítulo 8 de tu libro analizas el ajuste y crisis de la década de los 70 y
afirmas que es el periodo de vuelta a la normalidad del imperialismo. Es decir,
a partir de la crisis petrolera del 70 el capitalismo inaugura a sangre y fuego
con Pinochet, lo que se llama el modelo neoliberal. Y si se mira históricamente
lo que ha sido el capitalismo se puede afirmar que hasta esta etapa tan
importante no solamente a partir de la plusvalía sino de la explotación tan
profunda que este sistema conlleva per se, ¿podríamos colegir que el capitalismo
es el crimen perfecto?
– Muy buena
pregunta, no es fácil de resumir. A mí me parece que es interesante lo que
señalas respecto del punto de inflexión de los 70 que va mucho más allá de la
crisis petrolera, o que sea un mito o un detonante porque realmente hay eventos
de fondo previos incluso en particular el año 71, la ruptura de convertibilidad
de dólar/oro, esa idea de oro internacional se quiebra y se hace añicos. Desde
mi punto de vista, la clave es que hablamos de crisis de los 80, hablamos de
crisis hoy y entre medias qué ocurre, entre medias podemos hacer una trampa muy
querida de los economistas neoclásicos que es no mirar la realidad, si la
realidad y la interpretación difieren, dicen ellos, que la que está equivocada
es la realidad y no su interpretación. Como por supuesto queremos ser serios y
mirar la realidad, qué constatamos. Lo que constatamos es la universalización
de las políticas de ajuste que tratan de ser la respuesta a la crisis pero que
al final no hacen sino contribuir a que la economía desemboque en una crisis
aún más aguda. Si ves la definición misma, yo diría la huida hacia adelante y
la no salida. No hay alternativa dentro de este esquema de ajuste. Estamos
asistiendo hoy a un escenario brutal como la experiencia de Europa, que es muy
interesante. Es muy interesante porque esa Europa, la referente de desarrollo
democrático, económico y social a escala mundial, en ella vemos hoy cómo los
elementos básicos de ese desarrollo que le han hecho historialmente adquirir
cierto estatus de referente, hoy están siendo cuestionados frontalmente, están
cuestionados sin duda en Grecia, Portugal, Irlanda, España, Italia, pero
también en Francia y Alemania incluso. De modo que efectivamente yo creo que lo
que inaugura y además has puesto un punto de inflexión que no es cualquiera, es
la experiencia de Chile. Yo hice mi tesis doctoral sobre la economía chilena
durante la dictadura. Y creo que ahí sin falsa modestia hubo un elemento de
cierto olfato en la medida de que lo que inauguran es un escenario de
antecedente que va a tratar de aplicarse universalmente desde entonces. El tema
es fascinante desde luego. Dolorosamente fascinante si queremos decirlo así.
– Tú
señalas que no hay salida porque esta es una crisis civilizatoria generada por
un modelo exacerbado como el capitalismo. ¿Si hoy decimos Europa es
neoliberalismo o no es, porque en tu libro veo que haces un análisis de los
ajustes fondomonetaristas, estamos bien enfocados, habida cuenta que este
continente está entregado a la troika (Comisión Europea, Banco Central Europeo
y Fondo Monetario Internacional)?
– Exacto…
– Y el
hecho de que en tu país, España, no se pueda formar gobierno es una
consecuencia directa de las presiones de Ibex 35 (principal índice bursátil de
referencia de la bolsa española) y de la troika. La pregunta concreta entonces
es: ¿hay horizonte?
– La
pregunta es brillante porque realmente lo que constatamos hoy es la
imposibilidad de contener la situación, la Comisión Europea sigue el dictado
del FMI en la troika. La troika como un organismo tripartito: Banco Central
Europeo, Comisión Europea y Fondo Monetario Internacional. Pero digámoslo con
claridad, el Banco Central Europeo ya estaba aquí, la Comisión Europea ya
estaba aquí. En general la troika es el caballo de Troya dentro del cual el
Fondo Monetario Internacional, vale decir el capital financiero estadounidense,
quiere tomar las riendas directamente de la política económica de Europa de una
forma análoga a la que vosotros en América Latina habéis conocido bien desde
los años 80, con esas políticas de ajuste, con ese Fondo Monetario
Internacional dirigiendo de manera muy directa la política económica:
privatizaciones, desregulación, aperturas indiscriminadas, etc. Yo creo que es
muy significativo lo siguiente: ¿puede haber ajuste sin euro? Claro que puede
haberlo pero lo que no puede haber es euro sin ajuste, porque el euro es un
mecanismo económico del ajuste y efectivamente lo que expresa la crisis
española es brutal desde el punto de vista de la Comisión Europea porque el
capital tiene un programa que hay que ejecutarse ya, por ejemplo 9 mil millones
de euros de recorte del gasto público social. Pero qué ocurre, que no consiguen
encontrar la forma para aplicarlo y en este momento la situación es
verdaderamente explosiva ya que se ponen en marcha varios juegos simultáneos,
varias partidas de póker, varias partidas malas de póker digámoslo así, pero
con un denominador común: el mandato electoral que se expresó el 20 de
diciembre es inequívoco con aritmética parlamentaria para derogar todas y cada
una de las contrarreformas del Partido Popular que es un partido adherido
directamente a la dictadura. En España no ha habido ningún elemento de
saneamiento. La dictadura murió en la cama y el gobierno del Partido Popular es
una continuidad, en ese contexto el hecho es que hay aritmética parlamentaria
porque aparte hay cálculos modificateros que piensan más en una eventualidad de
repetición de las elecciones haciendo unos cálculos que posiblemente sean
disparatados. Esta situación nos está enseñando a vivir en una realidad
explosividad que resulta de un deterioro de las condiciones sociales que toma
cuerpo en España de una forma brutal. Está habiendo regiones, (nuestras
comunidades autónomas) donde los colegios se abren en los periodos vacacionales
como única forma de asegurar una ingesta alimentaria diaria a los niños. Es un
indicador brutal en una economía, la española, que con todas sus limitaciones
hace poco trinaba por un plan de G7. En España los salarios del año 78, en el marco
todavía de la transición democrática con todo el poder del franquismo
perfectamente mantenido, representaban el 67% del producto, dos terceras
partes, hoy representan apenas el 50% y es un problema que viene de lejos. Las
crisis en realidad expresan esa huida hacia adelante, no salida de la que
estamos hablando; y en ese contexto la situación social y política
efectivamente está muy abierta, más abierta que nunca.
– Así
como tu señalas, hablando políticamente, de que hay esta banda criminal
denominada Partido Popular que es herencia directa del franquismo y que ha
sumido a España en una crisis social, beneficiando en forma directa a los
sectores financieros, sin embargo no nos podemos olvidar de la responsabilidad
directa del Partido Socialista Obrero Español, que de “socialista” no tiene
nada, y del gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero cuya herencia básicamente
fue dejar a Mariano Rajoy. ¿No es en tu concepto el PSOE corresponsable de esta
crítica realidad social que vive tu país?
– El PSOE
tiene una responsabilidad directa y para mí hay un punto de inflexión en
relación con el periodo reciente, que es crucial y que es mayo de 2010. En esa
fecha ya con la crisis en curso y con un efecto social demoledor, con un alto
desempleo, etc., Zapatero viaja a Bruselas y le recibe una delegación que está
integrada no solo por la Comisión Europea sino también por el Fondo Monetario
Internacional que dicho de manera llana lo que le plantea es: tienes que
aplicar exactamente el programa contrario a aquel por el que te votaron.
Resumidamente se trata exactamente de eso. ¿Zapatero tenía alternativas? Por su
puesto que las tenía, Zapatero tenía alternativas no siendo un dirigente
revolucionario, sin duda, habría bastado simplemente que siendo demócrata a la
vuelta de Bruselas, y le voy a poner un poco de escenificación teatral para
visualizarlo, habría bastado que al llegar al aeropuerto de Madrid convocara
una rueda de prensa y hubiera dicho: señores, me quieren imponer que aplique
exactamente lo contrario que aquello que lo que votasteis y yo que no voy a
encabezar una rebelión simplemente llamo a las urnas. Habría sido una posición
honesta, que además hubiera abierto un escenario.
– Esa
experiencia de la imposición de la troika a Zapatero es una demostración de que
hoy la democracia está secuestrada por el capital financiero…
– Sin duda,
no solamente decía para ilustrar que sí había alternativa, es que no es verdad
que no haya alternativa.
– ¿Y el
caso de Alexis Tsipras en Grecia?
– Sí,
absolutamente, es que quería empezar por Zapatero y acabar por Tsipras para
señalar un hecho que tiene una importancia histórica y simbólica como tal y es
que el Fondo Monetario Internacional que no se presenta de forma directa a las
elecciones el 5 de julio de 2015 en Grecia, mueve sus fichas de la única forma
que sabe hacerlo: cuestionando la democracia, haciendo un chantaje que toma la
forma particular del corralito. El corralito no es una opción cualquiera, es
una amenaza a la población trabajadora en el sentido de que si votan romper con
las políticas de ajuste están amenazando sus ahorros. No es una cuestión
cualquiera. Y en ese contexto, valerosamente la clase trabajadora en Grecia
vota en contra del Fondo Monetario Internacional en una proporción que es ni
más ni menos que del 62%, que incluso con voto de abstención en realidad
representa casi las dos terceras partes, es un voto muy valioso. En el caso
griego lo que hace el gobierno es dar un giro de 180 grados y empezar a caminar
en dirección opuesta. Había salida, claro que la había. Aunque era idílica
había un escenario de panacea porque la única conclusión lógica era la de
respetar el mandato expresado el 5 de julio en las urnas. Cuál era un mensaje
de ruptura con la Unión Europea que abría ciertas expectativas de salida. Hay un
documento muy valioso de un economista diputado de Syriza que luego se fue con
Unidad Popular, Costas Lapavitsas, quien se remanga, se mete de lleno en el
charco y plantea, bueno, qué pasaría el día después. Y no es retórico, él habla
de que antes que nada tiene que asegurarse el suministro de medicamentos, de
alimentos, de energía, no es un juego y sin embargo señala la palanca que se le
abriría a un gobierno democrático griego: romper con el corsé del euro
movilizando simplemente el gasto público en ayuda al proceso de producción
cuando en Grecia hoy un 25% de la capacidad instalada está ociosa y no se va a
movilizar porque al capital privado no le conviene por cuanto vive de la
actividad puramente financiera y particularmente especulativa. Pero tampoco el
gobierno puede hacerlo en ese corsé férreo que es el euro que prohíbe
taxativamente cualquier mecanismo de solución.
– Y cómo
analizas el hecho de que Tsipras convoca un referéndum, lo gana y se asusta…
– Claro, en
realidad eso tiene que ver también con una cierta idealización que pensaba, no
en mi caso pero sí de otros, que Syriza era una especie de panacea. Cuando
observamos bien a Syriza qué constatamos. Encontramos muchas contradicciones.
Si se perdía el referendo se hubiera tenido la justificación para hacer lo que
finalmente se hizo. Pero el escenario inexplicable es que se ganó y
paradójicamente se va a aplicar un tercer memorándum que es más gravoso que
aquel que había sido sometido a referéndum. Es un plan de ajuste que está
provocando de nuevo protestas; los recortes en las pensiones son simplemente
salvajes; y sin embargo insisto, es aquello por lo que se votó en contra. Esto
tiene que ver con algo muy importante y es que a menudo miramos la propia
realidad de las organizaciones y de los partidos desde un punto de vista un
poco superficial. Desde cómo se presentan los fenómenos sin entrar a analizar
elementos de fondo. Y es que incluso en el propio programa de Syriza nunca se
planteó realmente ningún escenario, no digo de ruptura, sino uno frente a las
exigencias de la troika europea como finalmente ocurrió que echa por tierra las
reivindicaciones populares. Porque al final Syriza lo que hace es retractarse,
o mejor digámoslo así, se autoretractó.
– Pero
Podemos, la formación que lidera Pablo Iglesias en España, tampoco es de
ruptura. Podemos es una propuesta socialdemócrata que apunta a negociar con la
troika. ¿Su postura está sustentada a entenderse con Bruselas?
– De Podemos
cuestionaría incluso su condición socialdemócrata por una premisa: la
socialdemocracia tiene una responsabilidad histórica, es cierto, el seguir
defendiendo la idea de un reformismo cuando su contenido ni siquiera son
reformas, sino puras contrarreformas. Pero ojo, la socialdemocracia no deja de
ser una corriente que viene del movimiento obrero traído de lo que se quiera,
Podemos ni siquiera eso. En el argumento electoral de Podemos está prohibido
hablar de clases, está prohibido hablar de trabajadores, nos hablan de los de
abajo, nos hablan de la casta y esta formación tiene dos grandes ejes
programáticos: la regeneración democrática frente a la corrupción y el combate
contra los recortes sociales. Y aquí es muy importante la experiencia, creo yo,
de Lula en Brasil. En las elecciones del 89 el programa presidencial de Lula partía
de un no reconocimiento a la deuda, cuando tres periodos después por fin gana
las elecciones, viaja unas cuantas veces a Washington y ya no habla de la
deuda. Bueno, Podemos hace ese trayecto, lo ha recorrido en unos pocos meses,
no sé si con viajes a Washington o no, si sé que el dirigente responsable de
economía, Nacho Álvarez, amigo personal, yo le dirigí su tesis doctoral, sí se
reúne constantemente con algunos banqueros, con representantes del FMI, etc.,
¿para qué? Para darles garantías de que no quieren romper ni un solo plato. El
problema cuál es. El problema es que en el contexto en el que estamos no hay
espacios de una renegociación de la deuda que abra un escenario, y no lo digo
por ninguna pretensión nacionalista, todo lo contrario, mi pretensión es
intentar ojalá aproximar a esa gran mayoría social que está viendo como
aspectos elementales de sus condiciones de vida están cuestionadas. Al final
Podemos, no nos engañemos, devalúa más el contenido social de su programa y más
esa regeneración democrática que sin contenido social se parece mucho a quítate
tú que me pongo yo, a señores del capital nosotros vamos a llevar sus negocios
de una forma decente sin meterles la mano.
– ¿Lo que
hay en Europa son partidos como Podemos o como Syriza que únicamente están
buscando llegar al poder simplemente para administrar la crisis?
– Sí, con
una pretensión de algo que a mí me parece que se acerca a la cuadratura del
círculo, que es una pretensión de que puede haber una gestión progresiva de la
crisis según qué marcos. Y esta cuestión de los marcos importa en la actual
trayectoria que tenemos desde el año 93 del euro, del Banco Central Europeo que
es verdaderamente implacable. Es decir, la experiencia francesa, por ejemplo,
con la de un gobierno de izquierda que privatiza Air France, la compañía de
bandera con toda una tradición, quién la inicia, la inicia un ministro de
Transportes, Luc Panissod que era un dirigente del Partido Comunista francés y
no es una cuestión por mi parte de ajuste de cuentas, no me interesa esa
discusión, simplemente constatar que en el marco del corsé del Banco Central
Europeo, de la troika, el margen para aplicar las políticas es un margen muy
limitado.
– Tras
este contexto que me has dado respecto de la realidad socioeconómica europea, y
hablando desde el punto de vista global, ¿tú crees que la periferia en este
momento, América Latina en concreto y en forma puntual, va a seguir cumpliendo
su infortunado rol histórico de productor de materias primas y de plataforma
para la acumulación por desposesión por parte de las grandes transnacionales
norteamericanas y europeas? ¿Será que se repite la historia y que estos
pueblos, estas periferias, no tiene otro horizonte dentro del capitalismo?
– Claro que
en el marco del capitalismo el plan que está asignado es ese. Pero fíjate que
antes hablábamos de España que desde el pasado mes de enero está planteado un
plan de corte de gasto público social de 9 mil millones de euros y van pasando
los meses y el propio capital presiona en sentido de que haya una gran
coalición política para intentar aplicar su política y como bien decíamos no se
consigue. Entonces, claro que ese es el plan que está reservado para América
Latina, lo que ocurre es que Estados Unidos, la potencia hegemónica única,
sigue desarrollando el 42% de todo el gasto militar mundial pero a la vez es un
gigante con pies de barro. Y es un gigante con pies de barro incluso en su
propio patio trasero tradicional. Ahora bien, los acontecimientos de la
trayectoria histórica de América Latina de los últimos 40 años arrancan con la
crisis de los 70 que toma la forma de la deuda externa como hilo conductor,
coartada para las políticas de ajusta que provoca una deuda social y yo le
añado siempre puntos suspensivos. Puntos suspensivos que denotan el caldo de
cultivo para la exclusividad social que nos permite entender cómo desde hace 15
años el mapa geopolítico de América Latina es mucho más variado que el que hubo
en los años 80 y 90, mucho más uniformizado. Es verdad que Colombia con Panamá,
con México, con Perú, con Chile, encarnarían un elemento mucho más directo de
disciplinamiento a las políticas del Fondo Monetario que otros países con
términos intermedios. Pero en ese contexto, yo creo que el mandato del
imperialismo es claro y la capacidad de aplicarlo es mucho más limitado. Esto
es muy interesante, hace apenas 20 años queríamos pensar en escenarios donde la
situación estuviera abierta, pues seguramente habíamos recurrido a un comodín,
que se habría hablado de Palestina, de Oriente Medio, la situación estaba muy
explosiva. Hoy lo vemos en América Latina, hemos ido comentando la realidad en
Europa, lo vemos incluso en otras situaciones, en Estados Unidos en su
territorio. De repente irrumpen, no deposito ninguna ilusión, ninguna remisión
ni en Bernie Sanders ni en cualquiera, pero si denota la incapacidad, fíjate la
propia discusión dentro del Partido Republicano que al principio pensábamos,
hace un año y medio que el llamado nuevamente iba a ser otro Bush que
entroncaba con la tradición familiar, lo que representa Texas y vimos que no.
Hay un tipo millonario, mercenario, provocador, que parece que va decantándose.
No quiero elucubrar qué va a ocurrir, todo es publicidad en poco tiempo,
precisamente porque uno de los elementos característicos, y es con lo que yo
quiero responder a tu pregunta, de la situación actual es la enorme aceleración
de los tiempos históricos, una aceleración brutal, una aceleración que yo no
niego, produce vértigo. Entonces es cierto que los planes del imperialismo para
América Latina es más de lo mismo, eso es evidente, y le podrán cambiar el
nombre y lo traducirán y no sé cuánto, pero al final sigue siendo lo que tu muy
bien señalas, sin embargo la capacidad de disciplinar esas políticas cada vez
es más limitada. Es verdad que con vaivenes. Está lo de Venezuela hoy, luego lo
de Bolivia, lo de Argentina, la propia situación de Brasil, sin duda. Pero a la
vez con esta situación de incontenibilidad de la explosividad social que es el
elemento más definitorio porque por decir si pensamos hoy, por ejemplo en el
año 45, la salida de la Segunda Guerra Mundial, constatamos que el capital
tenía que hacer concesiones para aliviar la explosividad, pero podía hacerlas
porque eran compatibles con las exigencias de la contabilidad. ¿Hoy no debería
el capital aliviar, aflojar la presión en Grecia? Sin duda porque se arriesga a
un estallido social incontenible y sin embargo cuál es el problema. El problema
es que no puede económicamente porque hacer ese alivio significa que Grecia no
pagara deuda al ritmo que la paga y no pagar deuda quiere decir que alguien no
la cobraría. Por ejemplo, el capital financiero alemán que es el más expuesto y
por tanto ahí podríamos decir, ¿y las cuentas? Si Grecia representa el 2% del
PIB de la Unión Europea, ¿no se podría hacer un acuerdo de caballeros para
aliviar eso? Y ahí aparece la clave política; si Grecia muestra el ejemplo de
que la movilización arranca conquistas, automáticamente en España, en Portugal,
en Irlanda pero en Alemania también ya tenemos el referente, por eso la
situación está tan abierta, es tan explosiva, es tan dolorosa, pero también es
tan fascinante.
– La
crisis económica del 2007 prácticamente ha seguido, no ha terminado. La crisis
del 29 culminó con la Segunda Guerra Mundial y con ella vino el plan Marshall
para Europa y unas medidas keynesianas, pero ahora no hay un Keynes. ¿No será
que como no hay solución a una crisis prolongada suscitada en 2007 y 2008, se
pueda repetir la historia? La historia se repite a veces como tragedia, ¿y no
será que el mundo está abocado a una nueva guerra mundial para poder salir del
embrollo económico que ha generado el capitalismo?
– La primera
premisa es que hoy en la economía mundial se llega incluso a hablar de una
tercera recesión, seamos serios. Tres recesiones en ocho años es una crisis
profunda. Por tanto más bien hablemos de crisis crónica, primer elemento.
Segundo, recordáis el Plan Obama que tiene un monto que equivale exactamente a
una décima parte del rescate bancario. Sobre la base de esas dos premisas,
cuestionaría un poco o matizaría más ampliamente la idea de guerra mundial pero
no par a impugnar el contenido que tú dices sino para apoyarlo, en qué sentido;
en el sentido de que ya tenemos las guerras, las tenemos, las tenemos en el
corazón de Europa, la guerra de Ucrania es una guerra en el corazón de Europa y
en el Oriente Medio la situación es de guerra abierta, cuando se habla de una
forma dramática en Europa de cientos de miles de refugiados en torno a los
cuales se está autorretratando la Unión Europea. En Europa no se habla ni
siquiera de la categoría que conocemos que es el derecho de asilo y son
refugiados que vienen directamente de la guerra que ha sido dirigida,
teledirigida para romper la nación Siria, no solo por los intereses geoestratégicos,
también para romper lo que tiene de referente el Oriente Medio que en su
momento fue la nación iraquí, sin idealizaciones. Saddam Hussein no era ningún
referente, pero había una nación iraquí con un Estado, con un marco de
relaciones laborales, con un sector público, con una seguridad social limitada,
no era la francesa pero había elementos de economía. Lo mismo Siria, y todo eso
se destruye y por tanto los alcances de tu pregunta ni siquiera señala un
escenario futuro sino que ya tenemos aquí esos elementos. Lo que ocurre es que
sin embargo y quizá paradójicamente a mí no me lleva a una posición pesimista,
tampoco optimista, sí una sensación impotente que tiene que ver con una
comprensión que es lo que trata de aportar este libro de los procesos sociales
que no es esquemática, que no es lineal, que no pretende una perspectiva
determinista, pretender que todo está establecido ni para bien ni para mal sino
para señalar que todas las espadas están en lo alto y que por tanto tiene
sentido que hablemos de esto y tiene sentido intentar intervenir, intentar
agrupar para abrir una salida en positivo, salida que solo puede ser el
resultado de que aquellos quienes vivimos de nuestro trabajo por oposición a
aquellos que también viven de nuestro trabajo, la explotación de la que antes
hablábamos, somos los que tenemos la capacidad de abrir una salida en positivo
y ese es el reto.
Bogotá,
marzo de 2016.
Xabier
Arrizabalo y la Escuela Económica Marxista Española
Para conocer
el libro, queremos copiaros una reseña del Instituto Marxista de Economía:
El
significado profundo de la UE desde su origen hasta la actualidad
Publicado el
17 abr. 2014
El
significado profundo de la UE desde su origen hasta la actualidad: El euro, el
BCE y el FMI a través de ese caballo de Troya que es la "troika"
Conferencia dentro del VII Seminario de Economía Crítica el día 15 de Marzo de 2014. Por Xabier Arrizabalo Montoro.
Málaga.
Conferencia dentro del VII Seminario de Economía Crítica el día 15 de Marzo de 2014. Por Xabier Arrizabalo Montoro.
Málaga.