Escrito: En ruso en Petrogrado el 4 y 5
de abril de 1917.
Primera
edición: En el
número 26 de Pravda con la firma de "N.Lenin" el 7
de abril de 1917. Por fallos en la imprenta, dos dias después de la fecha -el
5- en que Lenin había ordenado que se publicaran las tesis. Los periódicos
bolcheviques de Moscú, Járkov, Krasnoyarsk, Ufá, Bakú, Tiflis y otros sitios
reprodujeron el artículo.
Fuente: Biblioteca de Textos Marxistas. Este enlace está desactivado.
Preparado para el MIA: Por Juan Fajardo, abril de 2000.
Habiendo
llegado a Petrogrado únicamente el 3 de abril por la noche, es natural que sólo
en nombre propio y con las consiguientes reservas, debidas a mi insuficiente
preparación, pude pronunciar en la asamblea del 4 de abril un informe acerca de
las tareas del proletariado revolucionario.
Lo único que
podía hacer para facilitarme la labor -y facilitársela también a los opositores
de buena fe- era preparar unas tesis por escrito. Las leí y entregué el texto
al camarada Tsereteli. Las leí muy despacio y por dos veces: primero en la
reunión de bolcheviques y después en la de bolcheviques y mencheviques.
Publico
estas tesis personales mías acompañadas únicamente de brevísimas notas
explicativas, que en mi informe fueron desarrolladas con mucha mayor amplitud.
TESIS
En nuestra
actitud ante la guerra, que por parte de Rusia sigue siendo indiscutiblemente
una guerra imperialista, de rapiña, también bajo el nuevo gobierno de Lvov y
Cía., en virtud del carácter capitalista de este gobierno, es intolerable la
más pequeña concesión al "defensismo revolucionario".
El
proletariado consciente sólo puede dar su asentimiento a una guerra
revolucionaria, que justifique verdaderamente el defensismo revolucionario,
bajo las siguientes condiciones: a)
paso del poder a manos del proletariado y de los sectores más pobres del
campesinado a él adheridos; b) renuncia
de hecho y no de palabra, a todas las anexiones; c) ruptura completa de hecho con todos los intereses del capital.
Dada la
indudable buena fe de grandes sectores de defensistas revolucionarios de filas,
que admiten la guerra sólo como una necesidad y no para fines de conquista, y
dado su engaño por la burguesía, es preciso aclararles su error de un modo
singularmente minucioso, paciente y perseverante, explicarles la ligazón indisoluble del capital con la guerra
imperialista y demostrarles que sin derrocar el capital es imposible poner fin
a la guerra con una paz verdaderamente democrática y no con una paz impuesta
por la violencia.
Organizar la
propaganda más amplia de este punto de vista en el ejército de operaciones.
Confraternización
en el frente.
La
peculiaridad del momento actual en Rusia consiste en el paso de la primera
etapa de la revolución, que ha dado el poder a la burguesía por carecer el
proletariado del grado necesario de conciencia y de organización, a su segunda
etapa, que debe poner el poder en manos del proletariado y de las capas pobres
del campesinado.
Este
tránsito se caracteriza, de una parte, por el máximo de legalidad (Rusia es hoy
el más libre de todos los países beligerantes); de otra parte, por la ausencia
de violencia contra las masas y, finalmente, por la confianza inconsciente de
éstas en el gobierno de los capitalistas, los peores enemigos de la paz y del
socialismo.
Esta
peculiaridad exige de nosotros habilidad para adaptarnos a las condiciones
especiales de la labor del partido entre masas inusitadamente amplias del
proletariado que acaban de despertar a la vida política.
Ningún apoyo
al Gobierno Provisional; explicar la completa falsedad de todas sus promesas,
sobre todo de la renuncia a las anexiones. Desenmascarar a este gobierno, que
es un gobierno de capitalistas, en vez de propugnar la inadmisible e ilusoria
"exigencia" de que deje de ser imperialista.
Reconocer
que, en la mayor parte de los Soviets de diputados obreros, nuestro partido
está en minoría y, por el momento, en una minoría reducida, frente al bloque de
todos los elementos pequeñoburgueses y oportunistas -sometidos a la influencia
de la burguesía y que llevan dicha influencia al seno del proletariado-, desde
los socialistas populares y los socialistas revolucionarios hasta el Comité de
Organización (Chjeídze, Tsereteli, etc), Steklov, etc, etc.
Explicar a
las masas que los Soviets de diputados obreros son la única forma posible de
gobierno revolucionario y que, por ello, mientras este gobierno se someta a la
influencia de la burguesía, nuestra misión sólo puede consistir en explicar los
errores de su táctica de un modo paciente, sistemático, tenaz y adaptado
especialmente a las necesidades prácticas de las masas.
Mientras
estemos en minoría, desarrollaremos una labor de crítica y esclarecimiento de
los errores, propugnando al mismo tiempo, la necesidad de que todo el poder del
Estado pase a los Soviets de diputados obreros, a fin de que, sobre la base de
la experiencia, las masas corrijan sus errores.
No una república parlamentaria -volver a ella desde los Soviets de
diputados obreros sería dar un paso atrás- sino una república de los Soviets de
diputados obreros, braceros y campesinos en todo el país, de abajo arriba.
La
remuneración de los funcionarios, todos ellos elegibles y amovibles en
cualquier momento, no deberá exceder del salario medio de un obrero calificado.
En el
programa agrario, trasladar el centro de gravedad a los Soviets de diputados
braceros.
Confiscación
de todas las tierras de los latifundios.
Nacionalización
de todas las tierras del país, de las que dispondrán los Soviets locales de
diputados braceros y campesinos. Creación de Soviets especiales de diputados
campesinos pobres. Hacer de cada gran finca (con una extensión de 100 a 300 deciatinas,
según las condiciones locales y de otro género y a juicio de las instituciones
locales) una hacienda modelo bajo el control de diputados braceros y a cuenta
de la administración local.
Fusión
inmediata de todos los bancos del país en un Banco Nacional único, sometido al
control de los Soviets de diputados obreros.
No
"implantación" del socialismo como nuestra tarea inmediata, sino
pasar únicamente a la instauración inmediata del control de la producción
social y de la distribución de los productos por los Soviets de diputados
obreros.
Tareas del
partido:
- celebración inmediata de un
congreso del partido;
- modificación del programa del
partido, principalmente:
- sobre el imperialismo y la
guerra imperialista,
- sobre la posición ante el
Estado y nuestra reivindicación de un "Estado-Comuna"2
- reforma del programa mínimo, ya
anticuado;
- cambio de denominación del
partido3
- Renovación de la Internacional.
- Iniciativa de constituir una
Internacional revolucionaria, una
- Internacional
contra los socialchovinistas y contra el "centro".4
Para que el
lector comprenda por qué hube de resaltar de manera especial, como rara
excepción, el "caso" de opositores de buena fe, le invito a comparar
estas tesis con la siguiente objeción del señor Goldenberg: Lenin -dice-
"ha enarbolado la bandera de la guerra civil en el seno de la democracia
revolucionaria". (Citado en el periódico Edinstvo, del señor Pléjanov,
núm.5)
Una perla,
¿verdad?
Escribo, leo
y machaco: "Dada la indudable buena fe de grandes sectores de defensistas
revolucionarios de filas..., dado su engaño por la burguesía, es preciso
aclararles su error de un modo singularmente minucioso, paciente y
perseverante..."
Y esos
señores de la burguesía, que se llaman socialdemócratas, que no pertenecen ni a
los grandes sectores ni a los defensistas revolucionarios de filas, tienen la
osadía de reproducir sin escrúpulos mis opiniones, interpretándolas así:
"ha enarbolado (!) la bandera (!) de la guerra civil" (¡ni en las
tesis ni en el informe se habla de ella para nada!) "en el seno (!!) de la
democracia revolucionaria..."
¿Qué
significa eso? ¿En qué se distingue de una incitación al pogromo?, ¿en qué se
diferencia de Rússkaya Volia?
Escribo, leo
y machaco: "Los Soviets de diputados obreros son la única forma posible de
gobierno revolucionario y, por ello, nuestra misión sólo puede consistir en
explicar los errores de su táctica de un modo paciente, sistemático, tenaz y
adaptado especialmente a las necesidades prácticas de las masas..."
Pero cierta
clase de opositores exponen mis puntos de vista ¡¡como un llamamiento a la
"guerra civil en el seno de la democracia revolucionaria"!!
He atacado
al Gobierno Provisional por no señalar un plazo, ni próximo ni remoto, para la
convocatoria de la Asamblea Constituyente y limitarse a simples promesas. Y he
demostrado que sin los Soviets de diputados obreros y soldados no está
garantizada la convocatoria de la Asamblea Constituyente ni es posible su
éxito.
¡¡¡Y se me
imputa que soy contrario a la convocatoria inmediata de la Asamblea
Constituyente!!!
Calificaría
todo eso de expresiones "delirantes" si decenas de años de lucha
política no me hubiesen enseñado a considerar una rara excepción la buena fe de
los opositores.
En su
periódico, el señor Gueorgui Plejánov ha calificado mi
discurso de "delirante". ¡Muy bien, señor Pléjanov! Pero fíjese cuán
torpón, inhábil y poco perspicaz es usted en su polémica. Si me pasé dos horas
delirando, ¿por qué aguantaron cientos de oyentes ese "delirio"? ¿Y
para qué dedica su periódico toda una columna a reseñar un "delirio"?
Mal liga eso, señor Pléjanov, muy mal.
Es mucho más
fácil, naturalmente, gritar, insultar y vociferar que intentar exponer,
explicar y recordar cómo enjuiciaban Marx y Engels en 1871, 1872 y 1875 las
experiencias de la Comuna de París y qué decían acerca del tipo de Estado que
necesita el proletariado.
Por lo
visto, el ex marxista señor Pléjanov no desea recordar el marxismo.
He citado
las palabras de Rosa Luxemburgo, que el
4 de agosto de 1914 denominó a la socialdemocracia alemana "cadáver
maloliente". Y los señores Pléjanov, Goldenberg y Cía. se sienten
"ofendidos" ... ¿en nombre de quién? ¡En nombre de los chovinistas
alemanes, calificados de chovinistas!
Los pobres
socialchovinistas rusos, socialistas de palabra y chovinistas de hecho, se han
armado un lío.
N.Lenin
1. Nota 1 de Lenin: Es decir,
sustitución del ejército permanente con el armamento general del pueblo.
2. Nota de Lenin: Es decir, de un
Estado cuyo prototipo dio la Comuna de Paris.
3. Nota de Lenin: En lugar de
"socialdemocracia", cuyos líderes oficiales han traicionado al
socialismo en el mundo entero, pasándose a la burguesía (lo mismo los
"defensistas" que los vacilantes "kautskianos"), debemos denominarnos Partido Comunista.
4. Nota Lenin: En la socialdemocracia
internacional se llama "centro" a la tendencia que vacila entre los
chovinistas (o "defensistas") y los internacionalistas, es decir:
Kautsky y Cía. en Alemania, Longuet y Cía. en Francia, Chjeídze y Cía. en
Rusia, Turati y Cía. en Italia, McDonald y Cía. en Inglaterra, etc.
KARL MARX:
EL DIECIOCHO BRUMARIO DE LUIS BONAPARTE
Escrito: Diciembre de 1851 - marzo de
1852.
En el Capítulo III explica Carlos Marx como y
cuando se creó el partido de la socialdemocracia
Rosa
Luxemburgo. Reforma o revolución
V. I. Lenin.
Marxismo y reformismo
Andrés Nin
La concepción marxista del poder y la revolución española
Karl Marx La
guerra civil en Francia- La Comuna de París
Defensismo
Gueorgui
Plejánov
Si pongo en
google Carlos Marx era socialdemócrata, comprobareis que salen las
intervenciones de Pablo Iglesias y Alberto Garzón “los preparaos” diciendo esta
barbaridad
Pablo Iglesias
y Alberto Garzón: “Marx y Engels eran socialdemócratas”
Discurso
histórico de Pablo Iglesias en el Fórum Europa
Emitido en
directo el 6 jun. 2016
Intervención
completa de Pablo Iglesias en el Fórum Europa organizado por Nueva Economía
Forum el 6 de Junio de 2016.
La presentación corrió a cargo de Alberto Garzón, candidato de Unidos Podemos al Congreso de los Diputados y Coordinador Federal de Izquierda Unida.
La presentación corrió a cargo de Alberto Garzón, candidato de Unidos Podemos al Congreso de los Diputados y Coordinador Federal de Izquierda Unida.
Pablo
Iglesias: Marx y Engels eran "socialdemócratas". Venezuela. Albert
Rivera. Forum Europa
Iglesias:
"Marx y Engels eran socialdemócratas"
No hay comentarios:
Publicar un comentario