Otras lecturas de interés
sobre el tema
Este blog cuestiónalo todo tiene más blog
Deconstruyendo mitos: la revolución islandesa
25 de mayo de 2011
Si hasta
hace unos años el imperio y sus medios de propaganda se dedicaban a crear
supuestas revoluciones ciudadanas en los países del este para justificar la
reinstauración de la dictadura capitalista, de un año para acá asistimos a un
bombardeo de alzamientos populares por todo el mundo que han llegado, incluso,
a "estallar" en las propias entrañas del paraíso de los banqueros y
grandes empresas.
Tiene
un gráfico lo explica
Deuda islandesa a
satisfacer cada año entre 2010 y 2023, cómo puede apreciarse, el porcentaje
que representa Icesave (en violeta) es solo una pequeña parte del total. |
Así, después de un bombardeo mediático insoportable sobre las presuntas revoluciones árabes, en las que supuestamente los pueblos de Medio Oriente y el norte de África salieron a la calle para pedir !una democracia como la nuestra! (es decir una dictadura del capital), después le toco el turno a la propia Europa. Así, y después de la famosa "revolución islandesa" asistimos a la etiquetada como "spanishrevolution", que como su propio nombre indica es, principalmente, una etiqueta mediática cuyos fines todavía no se conocen, aunque se sospechen.
Por supuesto que mientras los medios de propaganda del capital agitaban la bandera de los ciudadanos islandeses o españoles, ponían vedes, criminalizándolos, a los trabajadores griegos que si que salían a la calle a protestar y a exigir, tomando televisiones, amenazando con entrar en el parlamento, y, evidentemente, apaleados por la policía, y cuyas acciones son convenientemente minimizadas o, al contrario, anatemizadas.
En esta entrada nos centraremos en la ya citada "Revolución islandesa", en la que su mayor logro es que el pueblo se negara en un referéndum (por supuesto porque le preguntaron) a pagar una deuda injusta que habían provocado algunos despiadados y mafiosos banqueros (como los nuestros), y que por ello habían logrado la caída de un gobierno (y punto y final). También Francia dijo "No" a la Constitución Europea, y no pasó nada, o Irlanda tuvo que decir "Si" después de diversos intentos.
Parece que se esta avanzando en el proceso de vaciamiento del concepto "Revolución", que se puso en marcha en los años 90 cuando las grandes mentes goebblesianas de las oficinas de propaganda de la CIA se inventaron las "revoluciones de colores", con todos los matices menos por supuesto el rojo, en las que los propios trabajadores, ya "desposeídos" aparentemente de su característica de ser portadores de la fuerza de trabajo de la que los capitalistas sacan el beneficio que les mantiene sin dar palo al agua, exigían, como si fueran masoquistas, la instauración de un gobierno "libre", es decir, en manos de la clase oligárquica.
En los últimos meses la cosa ha cambiado un poco, y para llamar revolución a un acontecimiento basta, parece, con que se cambie de presidente, caigan gobiernos, o simplemente, se salga mucho en los periódicos, aunque el sistema y su funcionamiento no sufran cambio alguno.
Así, después de un bombardeo mediático insoportable sobre las presuntas revoluciones árabes, en las que supuestamente los pueblos de Medio Oriente y el norte de África salieron a la calle para pedir !una democracia como la nuestra! (es decir una dictadura del capital), después le toco el turno a la propia Europa. Así, y después de la famosa "revolución islandesa" asistimos a la etiquetada como "spanishrevolution", que como su propio nombre indica es, principalmente, una etiqueta mediática cuyos fines todavía no se conocen, aunque se sospechen.
Por supuesto que mientras los medios de propaganda del capital agitaban la bandera de los ciudadanos islandeses o españoles, ponían vedes, criminalizándolos, a los trabajadores griegos que si que salían a la calle a protestar y a exigir, tomando televisiones, amenazando con entrar en el parlamento, y, evidentemente, apaleados por la policía, y cuyas acciones son convenientemente minimizadas o, al contrario, anatemizadas.
En esta entrada nos centraremos en la ya citada "Revolución islandesa", en la que su mayor logro es que el pueblo se negara en un referéndum (por supuesto porque le preguntaron) a pagar una deuda injusta que habían provocado algunos despiadados y mafiosos banqueros (como los nuestros), y que por ello habían logrado la caída de un gobierno (y punto y final). También Francia dijo "No" a la Constitución Europea, y no pasó nada, o Irlanda tuvo que decir "Si" después de diversos intentos.
Parece que se esta avanzando en el proceso de vaciamiento del concepto "Revolución", que se puso en marcha en los años 90 cuando las grandes mentes goebblesianas de las oficinas de propaganda de la CIA se inventaron las "revoluciones de colores", con todos los matices menos por supuesto el rojo, en las que los propios trabajadores, ya "desposeídos" aparentemente de su característica de ser portadores de la fuerza de trabajo de la que los capitalistas sacan el beneficio que les mantiene sin dar palo al agua, exigían, como si fueran masoquistas, la instauración de un gobierno "libre", es decir, en manos de la clase oligárquica.
En los últimos meses la cosa ha cambiado un poco, y para llamar revolución a un acontecimiento basta, parece, con que se cambie de presidente, caigan gobiernos, o simplemente, se salga mucho en los periódicos, aunque el sistema y su funcionamiento no sufran cambio alguno.
Y esto es lo
que pasó también con la tan mediática revolución Islandesa, como explica
a la perfección en su blog La
saga de Dashiell un español expatriado en Islandia, y que
constata desde allí que ni por asomo los ciudadanos islandeses han tomado el
poder de ninguna manera, y que ni siquiera lo han intentado, que este sigue
estando en manos de la clase dominante, que las normas las decide la clase
política al servicio de los de siempre, y que si se les pregunto por referéndum
sobre si querían pagar o no parte de la deuda (no toda, pues la
mayoría se paga religiosamente) fue porque, simplemente, no había dinero
para salvar a los bancos, y si hubiera habido directamente lo habrían hecho
sin, por supuesto, rebajarse a preguntar al "populacho".
Así que el referéndum sirvió para dar una apariencia mayor de democracia al país nórdico, y así de paso, crear un mito, el de la "Revolucion Islandesa", que fomenta la beneficiosa idea (para los grandes capitalistas) de que muchos ciudadanos sigan pensando que es posible mejorar la democracia dentro del capitalismo; es decir, que sigan soñando mientras la oligarquía sigue disfrutando de sus privilegios sin demasiados problemas.
Estas son las razones aportadas por La saga de Dashiell que desmienten todo lo que los medios de propaganda nos han vendido sobre la Revolución en Islandia:
"PRIMERO: La banca islandesa no está nacionalizada. Los tres grandes bancos del país (que acabaron colapsando) fueron intervenidos, tras lo que Kaupthing y Glitnir se entregaron a sus acreedores (Que controlan el 87% del primero) y Landsbanki está pendiente de la resolución del grave conflicto del pago de la deuda de Icesave a sus clientes británicos y holandeses.
SEGUNDO: El pueblo no es quién está redactando la nueva Constitución. Islandia vivió unas elecciones para elegir a los miembros de una asamblea que tiene la potestad de aconsejar a los profesionales del derecho que van a hacerlo. Pero esa asamblea carece de poder alguno más allá del de consulta e incluso su formación se ha visto retrasada al ser declarados nulos los comicios por los que se elegía a sus miembros, unos comicios en los que solo se molestó en votar un tercio de los islandeses.
Las razones que llevaron al Tribunal Supremo islandés a tomar tal decisión son (personalmente, y esto lo digo yo, no el autor del blog islandés, si no hubieran sido estas ya habrían buscado algunas diferentes), entre otras, las siguientes:
1.- Las papeletas estaban numeradas, por lo que podría inferirse que aquellos que las manejaban tenían la posibilidad de tomar notas sobre qué ciudadano votaba a qué candidato, rompiéndose con ello el principio básico de privacidad.
2.- No se permitía doblar la papeleta.
3.- Se utilizaron cajas de cartón en vez de las clásicas urnas electorales lo que aumenta el riesgo de pucherazo (posibilidad de robo, dobles fondos, etc...)
TERCERO: Los responsables de la crisis no están encarcelados, ni Sigurdur Einarsson, ni Jón Ásgeir Jóhannesson, ni Geir Haarde, ni David Oddsson, ,ni Björgólfur Thor Björgólfsson están o han estado entre rejas como consecuencia del desastre económico sufrido en el país. Los más golpeados por la justicia de entre todos ellos fueron Hreidar Sigurdsson arrestado y puesto bajo custodia durante unos días y el ex CEO de Kaupthing (S. Einarsson) que tras haber sido incluido por interpol en sus archivos fue detenido la mañana del 9 de marzo de 2011 y liberado durante la noche del mismo día.
CUARTO: Si bien es cierto que los islandeses se han negado a pagar una parte de la deuda, en concreto el porcentaje de Icesave que reclaman sus acreedores, el 9 de abril va a celebrarse un nuevo referéndum y en estos momentos las dos corrientes de opinión están muy igualadas.
Una encuesta de Gallup muestra que el 63% de los electores se inclinan por asumir el pago aunque semanas después el apoyo para esta opción se reduce hasta el 52%.
QUINTO: El resto de la deuda, la mayor parte del total, un 96%, no podía pagarse puesto que equivalía a diez veces el PIB islandés y los intereses de la misma hubiesen superado cada ejercicio los ingresos del Estado. Según el polítólogo islandés Erikur Bergmann "Simplemente, no había dinero para rescatar a los bancos: de lo contrario, el Estado los habría salvado: ¡Llegamos a pedírselo a Rusia!. Fue un accidente: no queríamos, pero tuvimos que dejarlos quebrar y ahora los políticos tratan de vender esa leyenda de que Islandia ha dado otra respuesta".
SEXTO: Los islandeses siguen asqueados de su clase política, el recorte del Estado del bienestar no cesa y la desafección con sus representantes y con el sistema ha llegado a tal nivel que en las elecciones a la alcaldía de Reykjavík en 2010 (una institución poderosísima en el país) se inclinaron por el humorista Jón Gnarr del Besti flokkurinn (El mejor partido) un hombre que había efectuado propuestas hilarantes y surrealistas.
El nuevo alcalde rompió meses después las pocas promesas que había hecho, entre ellas no subir los impuestos ni recortar los servicios públicos a los ciudadanos pero a continuación recordó a sus electores que en su programa incluía la propuesta de no respetar nada de lo que hubiese prometido durante la campaña".
Esto ultimo (y también es opinión mía) muestra que en realidad se sigue prefiriendo delegar el poder en cualquier otra mano a esforzarse en participar en la construcción social y en la resolución de los problemas políticos, lo que es producto, claramente, de la domesticación que hemos sufrido en la familia, en la escuela y a través de los medios de comunicación, y según la cual nosotros tenemos que vivir la vida, dedicarnos especialmente al ocio, para gastar lo que hemos ganado trabajando, y a asumir que las cosas importantes son demasiado complicadas y que mejor las resuelvan los que saben... Es decir, todo lo contrario a la participación cotidiana desde la escuela, la fabrica o el barrio a través de consejos sobre la que se debe basar el Socialismo, es decir, el único camino a través del cual se puede construir también la democracia (que lamentablemente, como dicen nuestros lideres y nos hacen creer, no llueve del cielo).
Así que, aunque es genial que los islandeses hayan dicho no a la pregunta que se han dignado hacerles, eso no significa , aunque lo propaguen para el regocijo de los capitalistas y sus servidores desde todos los medios de propaganda, que haya existido en el pais vikingo ninguna revolución (claro que, mucho mejor que llamemos a cualquier protesta así, revolución, para que sea aun mucho mas difícil que se nos pase por la cabeza hacer una revolución de verdad, es decir, meter a los saqueadores y mafiosos políticos y económicos en las cárceles y que allí produzcan algo para la colectividad por una vez en su vida, y construir una democracia donde el poder este realmente en manos de la clase trabajadora `-y cuando digo poder digo también recursos, medios de producción, bancos, etc...).
Así que el referéndum sirvió para dar una apariencia mayor de democracia al país nórdico, y así de paso, crear un mito, el de la "Revolucion Islandesa", que fomenta la beneficiosa idea (para los grandes capitalistas) de que muchos ciudadanos sigan pensando que es posible mejorar la democracia dentro del capitalismo; es decir, que sigan soñando mientras la oligarquía sigue disfrutando de sus privilegios sin demasiados problemas.
Estas son las razones aportadas por La saga de Dashiell que desmienten todo lo que los medios de propaganda nos han vendido sobre la Revolución en Islandia:
"PRIMERO: La banca islandesa no está nacionalizada. Los tres grandes bancos del país (que acabaron colapsando) fueron intervenidos, tras lo que Kaupthing y Glitnir se entregaron a sus acreedores (Que controlan el 87% del primero) y Landsbanki está pendiente de la resolución del grave conflicto del pago de la deuda de Icesave a sus clientes británicos y holandeses.
SEGUNDO: El pueblo no es quién está redactando la nueva Constitución. Islandia vivió unas elecciones para elegir a los miembros de una asamblea que tiene la potestad de aconsejar a los profesionales del derecho que van a hacerlo. Pero esa asamblea carece de poder alguno más allá del de consulta e incluso su formación se ha visto retrasada al ser declarados nulos los comicios por los que se elegía a sus miembros, unos comicios en los que solo se molestó en votar un tercio de los islandeses.
Las razones que llevaron al Tribunal Supremo islandés a tomar tal decisión son (personalmente, y esto lo digo yo, no el autor del blog islandés, si no hubieran sido estas ya habrían buscado algunas diferentes), entre otras, las siguientes:
1.- Las papeletas estaban numeradas, por lo que podría inferirse que aquellos que las manejaban tenían la posibilidad de tomar notas sobre qué ciudadano votaba a qué candidato, rompiéndose con ello el principio básico de privacidad.
2.- No se permitía doblar la papeleta.
3.- Se utilizaron cajas de cartón en vez de las clásicas urnas electorales lo que aumenta el riesgo de pucherazo (posibilidad de robo, dobles fondos, etc...)
TERCERO: Los responsables de la crisis no están encarcelados, ni Sigurdur Einarsson, ni Jón Ásgeir Jóhannesson, ni Geir Haarde, ni David Oddsson, ,ni Björgólfur Thor Björgólfsson están o han estado entre rejas como consecuencia del desastre económico sufrido en el país. Los más golpeados por la justicia de entre todos ellos fueron Hreidar Sigurdsson arrestado y puesto bajo custodia durante unos días y el ex CEO de Kaupthing (S. Einarsson) que tras haber sido incluido por interpol en sus archivos fue detenido la mañana del 9 de marzo de 2011 y liberado durante la noche del mismo día.
CUARTO: Si bien es cierto que los islandeses se han negado a pagar una parte de la deuda, en concreto el porcentaje de Icesave que reclaman sus acreedores, el 9 de abril va a celebrarse un nuevo referéndum y en estos momentos las dos corrientes de opinión están muy igualadas.
Una encuesta de Gallup muestra que el 63% de los electores se inclinan por asumir el pago aunque semanas después el apoyo para esta opción se reduce hasta el 52%.
QUINTO: El resto de la deuda, la mayor parte del total, un 96%, no podía pagarse puesto que equivalía a diez veces el PIB islandés y los intereses de la misma hubiesen superado cada ejercicio los ingresos del Estado. Según el polítólogo islandés Erikur Bergmann "Simplemente, no había dinero para rescatar a los bancos: de lo contrario, el Estado los habría salvado: ¡Llegamos a pedírselo a Rusia!. Fue un accidente: no queríamos, pero tuvimos que dejarlos quebrar y ahora los políticos tratan de vender esa leyenda de que Islandia ha dado otra respuesta".
SEXTO: Los islandeses siguen asqueados de su clase política, el recorte del Estado del bienestar no cesa y la desafección con sus representantes y con el sistema ha llegado a tal nivel que en las elecciones a la alcaldía de Reykjavík en 2010 (una institución poderosísima en el país) se inclinaron por el humorista Jón Gnarr del Besti flokkurinn (El mejor partido) un hombre que había efectuado propuestas hilarantes y surrealistas.
El nuevo alcalde rompió meses después las pocas promesas que había hecho, entre ellas no subir los impuestos ni recortar los servicios públicos a los ciudadanos pero a continuación recordó a sus electores que en su programa incluía la propuesta de no respetar nada de lo que hubiese prometido durante la campaña".
Esto ultimo (y también es opinión mía) muestra que en realidad se sigue prefiriendo delegar el poder en cualquier otra mano a esforzarse en participar en la construcción social y en la resolución de los problemas políticos, lo que es producto, claramente, de la domesticación que hemos sufrido en la familia, en la escuela y a través de los medios de comunicación, y según la cual nosotros tenemos que vivir la vida, dedicarnos especialmente al ocio, para gastar lo que hemos ganado trabajando, y a asumir que las cosas importantes son demasiado complicadas y que mejor las resuelvan los que saben... Es decir, todo lo contrario a la participación cotidiana desde la escuela, la fabrica o el barrio a través de consejos sobre la que se debe basar el Socialismo, es decir, el único camino a través del cual se puede construir también la democracia (que lamentablemente, como dicen nuestros lideres y nos hacen creer, no llueve del cielo).
Así que, aunque es genial que los islandeses hayan dicho no a la pregunta que se han dignado hacerles, eso no significa , aunque lo propaguen para el regocijo de los capitalistas y sus servidores desde todos los medios de propaganda, que haya existido en el pais vikingo ninguna revolución (claro que, mucho mejor que llamemos a cualquier protesta así, revolución, para que sea aun mucho mas difícil que se nos pase por la cabeza hacer una revolución de verdad, es decir, meter a los saqueadores y mafiosos políticos y económicos en las cárceles y que allí produzcan algo para la colectividad por una vez en su vida, y construir una democracia donde el poder este realmente en manos de la clase trabajadora `-y cuando digo poder digo también recursos, medios de producción, bancos, etc...).
Otras lecturas de interés sobre
el tema
El mito
de la revolución Islandesa
Desmontando
el bulo de la revolución Islandesa
La
crisis continúa en Islandia
¿Quién
dijo que en Islandia hubo una revolución?
http://www.nodo50.org/tortuga/Quien-dijo-que-en-Islandia-hubo
No hay comentarios:
Publicar un comentario