NICOLAS M. SARRIES 14.10.2013
Las cifras oficiales del Banco de España limitan las ayudas públicas a 61.366 millones, pero se obvian partidas millonarias de dinero público y
Las cifras oficiales del Banco de España limitan las ayudas públicas a 61.366 millones, pero se obvian partidas millonarias de dinero público y
Así, las
entidades han obtenido más de 50.000 millones traspasando sus activos tóxicos
al Sareb, y tienen más de 40.000 millones en pérdidas protegidas.
Bruselas estima
que el 87% de las inyecciones de capital serán pérdidas (43.000 millones); el
FROB estima que se perderá el 72% (36.197 millones).
El pasado mes de septiembre, el Banco de
España publicaba
una nota informativa en la que contabilizaba las
ayudas públicas destinadas a recapitalizar el sistema financiero español entre
2009 y 2013. La cifra oficial es de unos
61.366 millones de euros, incluyendo el rescate
europeo de unos 40.000 millones. No reconoce -como el propio supervisor
bancario admite, "por su distinta naturaleza"- otro tipo de ayudas
puestas a disposición de las entidades con el apoyo explícito o implícito de
las administraciones públicas.
El propio Banco de España reconoce que no contabiliza oficialmente
todas las ayudas al sistema financiero
Sumando esas otras ayudas reales pero no
contabilizadas por las estadísticas oficiales, la recapitalización
de la banca española habría costado ya más
de 159.000 millones de euros, contando con otras medidas como los esquemas de
protección de activos y las distintas adquisiciones de activos tóxicos, según
cálculos de este diario a partir de informes
de la Plataforma Auditoría Ciudadana de la Deuda.
A una cifra de ayudas similar -más de 156.000
millones- llega el catedrático de economía Joaquín Maudos, en un artículo
publicado en el último número de los Cuadernos
de Información Económica publicados por la Fundación
de Cajas (Funcas). En su caso, sin embargo, a las inyecciones de capital
(54.700 millones) suma otros 101.600
millones entre distintos tipos de "deudas contingentes".
Pérdidas en las ayudas directas
Pérdidas en las ayudas directas El
contribuyente ha rescatado directamente al sistema financiero español por medio
de dos programas de ayudas públicas (llamados FROB 1 y 2) que costaron 977 y
13.427 millones de euros, respectivamente, y la recapitalización directa del
programa de asistencia europea, por un
importe de más de 39.078 millones de euros. El Banco
de España suma además otros 7.884 millones de euros
sufragados por el Fondo
de Garantía de Depósitos (FGD), organismo que cuenta
con la garantía del Estado.
Técnicamente la participación pública en el Sareb es de 2.000
millones, pero es el garante de 50.000 millones en deuda
Los
cálculos vigentes elaborados por el Fondo
de Reestructuración Ordenada Bancario (FROB) estiman
ahora que se perderá el 72% de la inversión realizada: más de 36.197 millones,
cifra admitida por el propio Gobierno. La Comisión Europea, por su parte,
elevan estas pérdidas hasta el 87% de las inyecciones, más de 43.000 millones que irán directamente al déficit público.
Hasta aquí las cuentas oficiales; pero la salvación del sistema financiero
tiene más costes.
Más de 52.000 millones del
'banco malo'
Es el caso, por ejemplo, del llamado banco
malo, la Sociedad de Gestión de
Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb), un organismo semipúblico que ha adquirido un 40% de los
activos tóxicos (suelo, créditos a promotores, inmuebles...) del sistema
financiero. Dichos activos, pese a que se adquirieron con un descuento medio
del 63% sobre su valor teórico (estimado por la propia entidad en sus cuentas),
no encontraban otro comprador desde el estallido de la burbuja inmobiliaria, y
han supuesto así una inyección indirecta
de capital para las entidades.
Técnicamente la participación pública en el
Sareb, la inmobiliaria más grande de España, es de 2.192 millones, que es el
importe de dinero público que se ha empleado para entrar en el capital de esta
entidad. Sin embargo, los más de 50.000 millones gastados para adquirir los
activos tóxicos son deuda avalada por el Estado. Es decir: la inmensa mayoría
del riesgo por futuras pérdidas del banco malo está respaldada por los
ciudadanos españoles. "Simular que no es una empresa pública [el 55% del
accionariado es privado] no es otra cosa que un flagrante fraude de ley", tal
como señala el economista Carlos Sánchez Mato, de la Plataforma para la Nacionalización de las Cajas.
Tampoco se contabilizan oficialmente, pero se
han empleado, otros más de 21.000 millones de euros que la administración
dispuso en distintos planes para dotar de liquidez a las entidades financieras,
como el Fondo de Adquisición de Activos Financieros (FAAF), liquidado en 2012.
Los EPA, ayuda para la banca sana
El Banco de España admite también que no
contabiliza los llamados "esquemas
de protección de carteras de activos" (EPA). Este tipo de programa
supone, en teoría, un apoyo a la integración de entidades financieras con
problemas dentro de entidades sanas, por medio de una garantía pública sobre las futuras pérdidas de determinados
activos. Así, por ejemplo, el Banco Sabadell adquirió la CAM en 2011 con la
condición de gozar
de un blindaje por el 80% de las futuras pérdidas de una cartera valorada en 16.000 millones de euros.
Los EPA, que permiten a las entidades reducir
su volumen de provisiones (es decir, sus reservas obligatorias para futuras
pérdidas), son "un concepto muy diferente al de la inyección de
capital", tal
como señala el supervisor bancario. Sin embargo,
han supuesto para todo el sistema financiero español un importe -en garantías a
determinados activos- de más de 35.681 millones de euros, que pueden dar lugar
a pérdidas a medida de pase el tiempo. Hasta el momento, y según datos
oficiales, las pérdidas esperadas
alcanzan ya los 6.506 millones de euros, "que se encuentran
provisionados en los estados financieros del FGD y del FROB", ambas
instituciones con la garantía final del Estado.
Mayor aún es la factura de los esquemas de
protección de activos según los últimos cálculos publicados por el Servicio de
Estudios de La Caixa, que en
un informe de enero estimaba en 42.000 millones el total de créditos e inmuebles protegidos
por el Fondo de Garantía de Depósitos, y de los que se esperan unas pérdidas
del entorno de los 10.000 millones de euros.
Avales y préstamos
Avales y préstamos
Las líneas de avales públicos es otra de las
vías que han tomado las autoridades españolas desde el inicio de la crisis para
auxiliar al sistema financiero. Como las entidades tenían cerrado en la
práctica el acceso a financiación del exterior (durante años los mercados
interbancarios permanecieron casi cerrados) el Estado ejerció de avalista
último, de forma que aumentaran las garantías. Hasta el momento se han devuelto, con intereses, el 48% de
los créditos avalados por la administración.
Las
cifras en cuanto a los avales públicos puestos a disposición de bancos y cajas
varían, según las fuentes.
Para el Servicio de Estudios de La Caixa el montante de
deuda no vencida (es decir, aún vigente) asciende a más de más de 64.000
millones, mientras que la Plataforma Auditoría Ciudadana de la Deuda eleva la cantidad hasta los 110.000
millones. También han ayudado a mantener la liquidez del sistema financiero
los préstamos del Banco Central Europeo (BCE) que han supuesto un montante de más de 350.000 millones de euros, y que
se tendrán que devolver.
Créditos fiscales de más de 63.000 millones
Mención aparte merecen los activos y créditos
fiscales, una "ayuda a la banca por la puerta de atrás", tal como la define Carlos Sánchez
Mato, de la Plataforma por la Nacionalización de las Cajas. En total
suponen más de 63.000 millones de euros
que se han contabilizado como beneficios, y de los que el Estado podría acabar
siendo el responsable.
Tal
como los define el propio BBVA, los activos
fiscales diferidos son "impuestos que se han de recuperar en ejercicios
futuros, incluidos los derivados de bases imponibles negativas o bonificaciones
fiscales pendientes de compensar". Es decir, a las entidades que han
sufrido pérdidas en sus balances se les ha permitido reducir las mismas en
concepto del impuesto de sociedades que se ahorrará en los próximos años (ya
que Hacienda permite compensar las
pérdidas actuales con menos tributos el futuro). Eso sí, hace
imprescindible que existan beneficios en el futuro para poder activar dichos
créditos fiscales.
La banca española ha utilizado masivamente
esta herramienta como si de capital propio se tratara, y las fuentes del sector
consultadas por este diario sitúan la cantidad total entre los 63.000 y los 50.000 millones de euros. El problema es que
las nuevas normas que aplicará la banca internacional (normas conocidas como Basilea III) impiden que estos activos fiscales formen parte del capital
mínimo exigido. Es decir: que sin garantía pública explícita de esos créditos
fiscales, las entidades tendrían que conseguir nuevo capital (accionistas) por
una cantidad equivalente.
Los canjes forzosos de
preferentes y deuda subordinada han inyectado 13.600 millones en las entidades
nacionalizadas.
El
Gobierno, tras meses de negociaciones con las entidades, ha llegado a un
acuerdo para permitir que éstas puedan seguir contabilizando como capital entre
25.000 y 30.000 millones de euros, tal
como informó Voz Pópuli. En resumen: se dará
privilegios fiscales a la banca, que podrán no pagar impuestos en función de
sus pérdidas. El Estado recaudará menos para evitar nuevas quiebras del sistema
financiero español.
Las preferentes, una ayuda privada
La imposición
de pérdidas a los inversores de participaciones preferentes y deuda subordinada
es otra ayuda, en este caso privado, que ha colaborado a recapitalizar a las
entidades financieras en problemas. Con los eufemismos de una "gestión de
híbridos" y un "reparto de la carga" y la excusa de reducir el
coste para el contribuyente, la Comisión Europea forzó a las cajas
nacionalizadas a convertir a sus preferentistas en accionistas forzosos,
aplicándoles además unas
pérdidas en el canje de hasta el 73% de lo invertido.
El coste total, según las estimaciones del
propio FROB, es que los dueños de preferentes y deuda subordinada han aportado 13.600 millones de euros para
recapitalizar al sistema financiero español. Estos nuevos accionistas y los
antiguos son, sin embargo, los que "han asumido la mayor parte del rescate
a la banca", en opinión del profesor Joaquín Maudos. Según sus
estimaciones las entidades han dedicado más de 250.000 euros a provisiones
desde el inicio de la crisis; estos saneamientos se han cargado contra
reservas, lo que explica los malos
resultados del sector en la Bolsa desde 2009.
Fuente: http://www.20minutos.es/noticia/1944887/0/coste-total/rescate/banca-espanola/
Fuente: http://www.20minutos.es/noticia/1944887/0/coste-total/rescate/banca-espanola/
La "idea general" del Eurogrupo es
que no habrá prórroga del rescate español
De Guindos descarta una prórroga del rescate a la banca y dice que "ya no genera dudas"
http://www.20minutos.es/noticia/1947247/0/eurogrupo/rescate-banca/de-guindos/
De Guindos descarta una prórroga del rescate a la banca y dice que "ya no genera dudas"
http://www.20minutos.es/noticia/1947247/0/eurogrupo/rescate-banca/de-guindos/
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