After Collected
Works Vol. 4, 1928, p. 403-406]
La huelga de masas política (Discurso, 14 de noviembre de 1905)
Discurso
en el Club Socialdemócrata del 2do distrito electoral de Hamburgo el 14 de
noviembre de 1905.
Un fenómeno
peculiar se puede observar ahora en la vida del partido: el interés en la
huelga política de masas. El problema en sí no es nuevo; En los
países romanos, especialmente después de 1890 pero también aquí en Alemania, se
prestó mucha atención a la huelga de masas, pero hasta hace unos meses los
socialdemócratas alemanes rechazaron la huelga de masas como un arma. Pero
ahora se ha producido un cambio repentino, y nuestra máxima autoridad, el
congreso, ha tomado una posición en Jena. El
término "huelga de masas" es como la palabra "revolución".
De repente, en Rusia, inesperadamente por parte de las masas, estalló una
verdadera revolución, y el poder de los hechos contra la paz, que durante mucho
tiempo se ha predicado una y otra vez, salió a la luz. Y el hecho de que
haya tanto interés en el problema de la huelga de masas en Alemania demuestra
el instinto seguro de la clase trabajadora, que siente la llegada de un gran
conflicto y quiere prepararse para ello. Esto no puede ser contrarrestado
por una resolución, como lo quería el Congreso de Sindicatos de Colonia. Las
masas, la clase obrera con conciencia de clase, en su instinto seguro van más
allá de las opiniones de sus llamados líderes. La socialdemocracia alemana
todavía está a la vanguardia de la socialdemocracia internacional en la
actualidad; Pero nuestro partido acaba de crecer en el piso de las
tácticas parlamentarias.
Ahora
tenemos que experimentar que aquí y allá, bajo nuestros líderes, el parlamentarismo
se derrumba como una capa delgada de hielo.1
Esto prueba
el instinto seguro de la clase trabajadora, que percibe la llegada de un gran
conflicto y quiere prepararse para ello.
Y tenemos que
experimentarlo en la orgullosa República Hanseática de Hamburgo. Sin
embargo, Ludwig Börne dijo a finales de los años veinte del siglo pasado que el
Consejo Federal completamente monárquico abandonó la República de Hamburgo para
ridiculizar a la República. Y Heinrich Heine trató a esta república con un
ridículo justificado. Pero también vemos en otros lugares que el
parlamentarismo ya no es suficiente. Todas estas observaciones que hacemos
sobre el curso de las cosas nos llevan a creer que todos los cálculos basados
en el parlamentarismo se basan en la arena. Además, si echamos un
vistazo a nuestro pronóstico del clima social, por ejemplo, el área del Ruhr,
vemos que los conflictos pendientes no se pueden descargar ni en las áreas
parlamentarias ni en las sindicales. Nuestros documentos sindicales llaman
la atención sobre los medios traicioneros del espíritu empresarial contra los
cuales los sindicatos no pueden hacer nada: ¡el cierre patronal! La
capital ya no está a la defensiva, sino que ya pasó a la ofensiva. En la
industria de máquinas a gran escala, donde está altamente desarrollada, el
acuerdo de negociación colectiva, por lo demás anulado, se ha superado a medida
que se ha sobrevivido. Las luchas en la industria textil de Sajonia y Turingia
nos enseñan eso y, sin embargo, hasta hace poco, había camaradas en nuestras
filas que representaban la doctrina de Marx del empobrecimiento de las masas
como algo vencido, y ante las condiciones de terrible miseria en el mundo industria
textil. Una mirada a las luchas desesperadas y desesperadas de estos
trabajadores debe enseñarnos que hay un abismo, que la unión nunca puede
salvar. Luego presiona los Nuevos problemas, y especialmente los de
la huelga política de masas.
Desde el
principio, esta pregunta fue puesta en un terreno falso: por un lado, los defensores
firmes, como Bernstein
y el Dr. Friedeberg, por otro lado, la gente que
simplemente declara: "La huelga general es una tontería general".
Ambos lados están equivocados, creyendo que la huelga de masas es simplemente
una decisión, y ambos puntos de vista no están libres del pensamiento
anarquista. Ambas direcciones coinciden en la idea de que nuestros principios y
nuestras tácticas son dos cosas separadas, mutuamente independientes.
Hemos
utilizado con éxito el parlamentarismo durante mucho tiempo. Ahora ese
pollito tiene que volar el huevo en el que ha crecido. Y debemos poner fin
a la concepción plana de la huelga de masas, tal como aparece aquí en Hamburgo
en documentos individuales. No podemos involucrarnos en las cien preguntas
sobre la posibilidad o imposibilidad.
Hagamos un
viaje al campo de la política exterior, donde, desafortunadamente, nuestras
esperanzas están en el agua en el sentido ordinario de la palabra; Veamos
las guerras y luchas en el este de Asia. De hecho, notamos un nuevo enfoque
de la política internacional, un cambio en los intereses, un desarrollo de la
política mundial, como Marx previó años atrás. Como resultado, los
destinos de los países europeos se vuelven mucho más incontrolables y las
implicaciones se han vuelto más amenazadoras que nunca. La verdadera
guerra del este asiático aún no ha terminado, sino que será el punto de partida
para nuevas luchas y luchas por Europa. La primera consecuencia será el fortalecimiento del militarismo y
para el nuevo endurecimiento del cinturón de hambre. Pero al
lado vendrá el colapso de todas las clases medias, en la
medida en que aún no ha ocurrido. Y luego habrá una gran
brecha entre las dos clases. Ahora vemos la enorme tormenta eléctrica en
Rusia. Ya no es el apoyo de la reacción, el campeón de la revolución es
Rusia hoy. Depende de nosotros aprender de ello. Bajo la superficie
de la lucha por las nuevas formas liberales burguesas de organización estatal
se encuentra el inmenso poder del proletariado, que lucha por un nuevo orden
social. La victoria será la revolución rusa; ¿pero no podría hacer
más que establecer la monótona cinta de andar del parlamentarismo
burgués? No, la futura Rusia
será la socialista. ¡Conviértete en un elemento
fermentador para toda Europa! Tenemos una idea de lo que
ya en Austria. Con lógica convincente se nos hace creer que la
Revolución rusa es solo el prólogo de los europeos. La vieja historia de
Klepper será obligada a galopar, y el proletariado debe recordar la palabra de Marx de que el proletariado no tiene más que perder que sus
cadenas. Pero si la salvaguardia del sufragio u otras
circunstancias provocarán el esfuerzo del proletariado no existe; Sería
posible, por ejemplo, que una ayuda de cierto lado para el absolutismo ruso
resultara en una rebelión espontánea de los trabajadores alemanes. No
importa, no tenemos que discutir la fecha o las condiciones de la huelga de
masas concreta. Vimos en Rusia que donde se necesita, estalla por sí
mismo y logra el éxito. En cualquier caso, sabemos que en la situación
actual la huelga de masas es la condición previa de la acción de masas del
proletariado.
Fue aquí, en
Hamburgo, por ejemplo, que algunos individuos habían actuado de forma extraña
contra la idea de una huelga de masas. Seguía siendo objeto de examen, el
"eco" de un discurso literal siguiente: "Usted todavía recuerda
esa enorme cantidad de explosivos en la huelga de masas se acumula en la mente
Sé que usted busca, pero asegúrese de que las masas tomarían parte en los medios
de llegar a un político serio lo hará? tener cuidado de no decir que sí. Y un
grave políticos trabajador deje de experimentos cuestionables, no uno. ¿Cuántas
son de los tres millones de votantes siguen la llamada? Sí, ¿cuántos son causa
de ellos organizados? siempre y cuando él no está establecido, siempre y cuando
se deja el quédate fuera del juego, pero aparte de los tres millones, todavía
hay entre ocho y nueve millones de proletarios lejos de nosotros. ¿Se
pueden ganar solo en buena medida para la idea de huelga general? ¿Y qué
hay de las innumerables existencias proletarias de pequeñas
artesanías? ¡Era solo una combinación vaga que la interrupción económica
que siguió los llevaría a la idea! ¿Cómo te imaginas finalmente el efecto? ¿De
dónde quieres llevar la comida? ¿Cómo puedes mirar solo a uno así? Perder
la idea locamente loca? "
Tal visión
solo se encuentra en la decisión tomada por una autoridad bávara hace más de
cincuenta años, según la cual el transporte ferroviario no está permitido por
razones higiénicas y otras, y el cálculo, solo con el número de trabajadores
organizados, fue la idea La huelga de masas en general está siendo refutada por
la Revolución rusa, en la que vemos a un proletariado en gran medida no
probado. En algunas circunstancias, incluso la educación más alta de la
organización puede convertirse en un obstáculo para el movimiento, como lo
vemos en las uniones fósiles de Inglaterra. De la necesidad predicada de
"reposo para el desarrollo",
la inclinación puede surgir muy fácilmente para pasar del reposo a la
contracción, pero luego, con las dudas morales, con la frase: ¿Mientras
que hambre por una mejora en las condiciones sociales? La respuesta, sin
embargo, fue la batalla de junio. La fecha límite no se utilizó para el
trabajo social, sino para preparar la carnicería. Sí, los eventos, el
desarrollo de la revolución simplemente no se pueden calcular, ¡una revolución
no es un proceso civil! Tenemos que llegar ahí a la espera para que
los pequeños aspectos de la lucha diaria, el pantano parlamentaria a un lado
para educar a las masas a su deber para que sean conscientes de amonestar a
ella: Listo para ser es todo!
1 deterioro
de los derechos electorales en Hamburgo.
Rosa
Luxemburg. Los debates en Colonia. (30/31 de mayo de 1905) Debate sobre la
huelga política de masas 1905 – 1906 primera
parte.
Rosa Luxemburg. Revolución y huelga de masas (Discurso en el Congreso del
Partido del SPD (Socialdemócrata de Alemania) en Jena, 22 de septiembre de
1905) Debate sobre la huelga política de masas 1905 – 1906 segunda parte.
Rosa Luxemburgo. Discurso, Política mundial y huelga de masas. 7 de
noviembre de 1905. Debate sobre la huelga política de masas 1905 – 1906 tercera
parte.
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